La Diócesis de Ávila habilita varios centros para acoger a los evacuados por los incendios en la región

La Diócesis de Ávila ha puesto a disposición de las autoridades provinciales varios centros con el objetivo de alojar a las familias evacuadas de la zona afectada por el incendio forestal de Navalacruz, que permanece activo desde el pasado sábado, 14 de agosto.

Entre los centros adaptados, la diócesis ha dispuesto que la Casa de Ejercicios y el Colegio que administran sean destinados al alojamiento de los brigadas que contribuyen en la extinción de las llamas.

Incendios agravados por el calor en toda España

El fuego que intentan extinguir los bomberos de Ávila fue declarado el pasado sábado, 14 de agosto, tras originarse el incendio de un coche que se encontraba situado en un arcén. Debido al intenso calor, el fuego se ha potenciado y ha adquirido la categoría de incendio forestal. Por su parte, el Ayuntamiento de Ávila ha adaptado algunos centros públicos, como un polideportivo y el Centro de Congresos, para acoger a los vecinos que huyen del fuego.

Debido a la intensidad de los incendios, la Junta de Castilla y León ha solicitado el apoyo de la Comunidad de Madrid, la Junta de Castilla-la Mancha y la Junta de Extremadura. Hasta el momento, la sección madrileña de Emergencias ha enviado a la zona afectada cuatro equipos de bomberos, de los cuales son tres terrestres y un helicóptero. También se ha sumado a los equipos de extinción del fuego la Unidad Militar de Emergencias (UME).

Al incendio de Navalacruz se unen los que tienen lugar en Azuébar (Castellón), el mayor que sufre esa región desde el año 2017. Este fuego ha provocado el desplazamiento de al menos 500 vecinos, que se han visto obligados a dejar sus hogares. Sin embargo, el equipo de bomberos ha podido estabilizar las llamas, al tiempo que califica su evolución como "favorable".

El puerto de Sagunto ha restaurado el tráfico marítimo después de que sus aguas fueran utilizadas por los helicópteros para contribuir a la extinción del fuego.