La vida incansable del Venerable Aloysius Schwartz: "Quería conocer y vivir la agonía de Cristo"
El presbítero renunció a toda comodidad para vivir atendiendo a los más desfavorecidos. Al ser diagnosticado de ELA, redobló sus esfuerzos al servicio de los pobres
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Aloysius Schwartz nació en Washington en el año 1930. Durante toda su vida, este sacerdote se esforzó por llevar a Cristo hasta los más pobres y desfavorecidos.
Después de ser ordenado sacerdote en 1957, el P. Aloysius pidió ser enviado al lugar más desfavorecido que existiera en el mundo, por lo que fue destinado a Corea del Sur. En aquellos momentos, el país salía de la guerra civil que había separado el territorio coreano entre norte y sur, después de un conflicto de tres años con miles de víctimas mortales.
El prebítero consagró su sacerdocio a la Virgen de los Pobres, advocación bajo la cual se había aparecido Nuestra Señora en Bélgica en el año 1933, y que él conocía por haber estudiado en la Universidad de Lovaina, ubicada en este país europeo. Precisamente, el P. Aloysius prometió a la Virgen de los Pobres no tomarse ni un solo día libre para servir a los marginados de la sociedad.
Según Kevin Wells, uno de sus biógrafos, el P. Schwartz deseaba vivir la pobreza de Cristo: "Sabía que servir a los pobres sin vivir pobre solo llegaría hasta cierto punto. Quería conocer y vivir la agonía de Cristo tendido en la cruz, donde daría su sangre, para darlo todo".
Aloysius Schwartz, pobre entre los pobres
De este modo, su vida en Corea transcurrió como la de cualquier otra víctima de la posguerra, sin ningún tipo de comodidad. Algún tiempo después nació la agrupación de Hermanas de María, conformada por feligresas del sacerdote que le ayudaron a asistir a los pobres.
Además, el P. Al -como se le apodaba- fundó varias aldeas para niños denominadas 'Boystowns' o 'Girlstowns'. En ellas, las Hermanas de María acogían a niños abandonados, pobres o huérfanos para darles una formación. Actualmente, la congregación fundada por el presbítero, constituida por aproximadamente 400 religiosas, ha formado académica y espiritualmente a más de 170.000 jóvenes a lo largo de su historia. También impulsó la construcción de varios hospitales y albergues, entre ellos algunos sanatorios para indigentes que se encontraran enfermos de tuberculosis.
Durante una visita que realizó a los Estados Unidos, el P. Aloysius fue diagnosticado de ELA (Esclerosis Lateral Amiotrófica). Al conocer que tan solo le quedaban tres años de vida, lejos de reducir sus labores, el sacerdote decidió trabajar más duro, abriendo nuevos hogares. Así lo hizo en México, donde conocía que las personas estaban perdiendo la fe.
El P. Aloysius Schwartz falleció a causa de su enfermedad en 1992. Tras la apertura de su causa de canonización en 2003, el Papa Francisco lo declaró venerable en 2015.