"Hay un abismo moral entre ese error y la voluntad decidida de Sánchez de favorecer a los criminales de ETA"

Antonio Jiménez, director de 'El Cascabel', reacciona a las disculpas de Feijóo, donde califica de "error injustificable" el apoyo a una reforma que permitirá adelantar la excarcelación de etarras

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En primer lugar, admitir el error. En segundo lugar, calificar el error como un error injustificable. Hay un abismo moral entre un error en una tramitación parlamentaria y la voluntad deliberada de sacar de la cárcel los presos condenados por asesinato pertenecientes a ETA para mantener al señor Sánchez en el Gobierno”. Feijóo ha vuelto a pedir perdón a las víctimas y ha calificado de error injustificable que su partido, desconociendo la enmienda que posibilita todo ello, votara a favor para permitir que etarras sanguinarios, que están cumpliendo condenas en España –44 se van a beneficiar–, puedan beneficiarse de esa reforma, hasta el punto de abandonar la cárcel en los próximos meses. Una reforma que el Gobierno va a mantener contra viento y marea. Y tiene razón, más allá de lo injustificable del error cometido por la oposición en general, no solamente el PP, también Vox, Unión de Pueblo de Navarro, Coalición canaria, porque sus diputados en la Comisión de Justicia no advirtieron lo que estaba pasando.

No advirtieron una enmienda tan indigna como la que los comunistas de Sumar, socios de Sánchez en su Gobierno, introdujeron. Se la colaron, así de claro. No sé si habrá luego consecuencias, pero se la colaron. Y no tienen que hacer muchas cosas para advertir situaciones como esta. Y controlar al Gobierno. De eso se trata controlar al Gobierno, que no te la cuele. Un Gobierno presidido por un aventurero, como es Pedro Sánchez, singularizado por sus mentiras y por todo tipo de artimañas y trampas para seguir en la Moncloa.

Pero eso no justifica, un error no puede justificar el abismo moral que hay entre ese error, por cierto, y la voluntad decidida de Sánchez de favorecer a los criminales de ETA, como está haciéndolo, excarcelándolos o ayudando a que salgan de la cárcel, con el fin de obtener los siete votos delito. Que de eso se trata. Siete votos para que yo siga en la Moncloa. Votos de sangre, en definitiva, los que Sánchez está utilizando en esta historia. Y las víctimas sufriendo otra indignidad más.

Feijóo ha mandado a su secretaria general, Gamarra, para que le pida al Gobierno que reconsidere y retire esa enmienda. ¿Y qué ha dicho Bolaños? Que no. Bolaños, encima, se ha burlado, se ha cachondeado del Partido Popular. Son ustedes los que están cambiando de opinión. Nosotros hemos hecho lo que hicimos desde el primer momento. Seguimos lo que ya aprobamos. Son ustedes los que ahora no quieren aceptar lo que aprobaron. Se lo ha pedido la portavoz del Partido Popular en el Senado y han visto cómo ha respondido Bolaños: “Exigimos que impida la excarcelación de los asesinos de Miguel Ángel Blanco o Fernando Múgica. Y si no lo hacen, haya ustedes con su conciencia. Pidan perdón a las víctimas. Pidan perdón a los españoles. Y renuncien a su ‘Manual de resistencia’ contra la democracia y cierren al salir” - “Se empeñan ustedes en convertir todo en material para intentar crispar a la sociedad, para envenenar la sociedad española. Todo lo utilizan ustedes para intentar crispar a la sociedad. Y en esa crispación a mí no me va a encontrar. Ustedes, sus problemas, los solucionan solitos”.

Insisto, error lamentable de la oposición, del Partido Popular, de Vox, error injustificable, como lo ha calificado Feijóo, pero está la voluntad deliberada del gobierno para favorecer a los presos terroristas de ETA que, incluidos sus compañeros socialistas, fueron asesinados y que ahora no tendrán más que lamentar cómo desde el Partido Socialista se están apoyando estas iniciativas en favor de un grupo político heredero de la banda asesina ETA.

Hoy, además, la ministra portavoz ha utilizado la sala de prensa del Consejo de Ministros para mentir descaradamente, no solamente en este asunto, sino también en aquel otro que afecta a Begoña Gómez. Una alumna muy aventajada de su jefe en esto de mentir. La señora Alegría, ministra portavoz. Hasta medios poco sospechosos de no bailarle el agua al Gobierno, como la Sexta o El País, ya la han tildado incluso hoy de tramposa, porque ha hecho trampas. Ha mentido y ha trampeado.