El drama de Francisco, indefenso ante los okupas: "Si no se cambia la legislación no habrá justicia"

Sus inquilinos llevan más de dos años sin pagarle el alquiler y se acogen a su estado de vulnerabilidad para evitar el desahucio ante la justicia

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Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

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El problema de la okupación sigue acechando nuestro país. Las cifras hablan por sí solas: solamente durante el pasado año 2023, en España se produjeron más de 15.000 okupaciones. Aunque los datos han caído un 8% con respecto al año anterior, siguen siendo demoledores. Especialmente para quién lo sufre en primera persona. Es el caso de Francisco Estévez. Es propietario de un piso que está en pleno centro de la ciudad de Málaga. Sus okupas dejaron de pagarle a los dos meses de entrar en la vivienda y a día de hoy llevan ya tres años sin abonarle el alquiler. A pesar de que Francisco ha ganado varios juicios y de su lucha, los okupas se niegan a abandonar la vivienda y nadie consigue echarles. Una auténtica pesadilla de la que no consigue librarse.

¿Okupas vulnerables?

Francisco decidió alquilar su vivienda acogiéndose a un programa de ayuda social a personas en exclución social y los dos primeros años que ellos recibían una ayuda, le estuvieron pagando. La cosa cambió cuando les dijo que necesitaba el piso para su hijo: "ellos pagaron tres meses completos, pero cuando les die que ya iba a renovat el programa de ayuda se asesoraron y como la ley ampara a los declarados vulnerables se acogieron a ello". El propietario asegura que llevan seis años sin trabajar no porque no puedan sino porque ni quieren ni buscan: "Están viviendo de ayudas sociales con mi piso gratis desde hace 30 meses". Con el ejemplo de su caso, Francisco lanza un mensaje a las administraciones públicas: " Deberían dar una alternativa habitacional a estas personas pero como en la ley de vivienda no especifica ningún plazo se limitan a declararlos vulnerables y a decirnos que no disponen de viviendas sociales para facilitarles". Critica que sean los afectados los que no tengan ningún amparo y que no se cambie la ley:"los propietarios somos el escudo social de este Gobierno y los que tenemos que aguantar la presión de no disponer de nuestra vivienda. Si no se cambia la lefislación no habrá justicia".

A pesar de tener una sentencia ganada, ha sufrifo ya tres aplazamientos de desahucio y mientras tanto su hijo está viviendo de alquiler, insiste: "teniendo yo un piso comprado para que se pudiera independizar".

La solución a la okupación en términos jurídicos

Vicente Magro, magistrado del Tribunal Supremo y autor del libro 'Cómo afrontar jurídicamente la okupación ilegal de un inmueble', asegura en 'Trece al Día' que sí que hay solución a esta problemática, pero matiza: "La cuestión es sin embargo que habiendo soluciones, hay que tener voluntad para aplicarlas y sobre todo escuchar a los que estamos trabajando desde la adjudicatura, a la fiscalía, la policía, los afectados... ". Un paquete de ideas que hay que llevar a cabo: "hay que plasmarlo en una ley, llevarla al Parlamento y aprobarla para que los jueces podamos aplicarla".

Además añade que normalmente en estos casos caemos en un error: "existe la creencia de que una persona que tiene una segunda o una tercera vivienda es una persona solvente y que tiene derecho a estar a la espera de que se resuelva durante el tiempo que haga falta por la aplicación del fenómeno de la vulnerabilidad·. El magistrado defiende que el ciudadano no tiene que hacer el papel de la administración pública, que es lo que está pasando en la actualidad.

Desamparo en los afectados

Ricardo Bravo, portavoz de la Plataforma de los afectados por la okupación, explica en 'Trece al Día' que es una plataforma que "está formada por víctimas para ayudar otras víctimas ya que no hay una legislación, ni una ley que ampare los derechos de las víctimas". Denuncian que el tipo de okupación que se sufre en la actualidad ha cambiado, "ha aparecido la denominada inquiokupación que supone el 75% de los afectados". Un fenómeno en el que en muchas ocasiones, asegura, ellos mismos tienen que hacerse cargo: "En la inquiokupación tenemos que cubrir los suministros de estas familias vulnerables".

En cuanto al plazo que se tarda en recuperar una vivienda, señala por su experiencia y los casos cercanos que conoce, que "no hay un plazo para recuperar una casa, encontramos a algunas personas que lo recuperan en dos y a otras que en cinco". Eso, sí, en todos los casos son procesos largos y costosos.

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