La Bolsa se deja arrastrar por el desánimo y cierra con pérdidas extendidas

Lo de hoy ha sido un quiero y no puedo en la Bolsa. Poco a poco han ido ganando terreno los recelos de los inversores, que han preferido deshacer posiciones y esperar tiempos mejores fuera del mercado. El día ha dejado un regusto amargo entre los bolsistas. El índice Ibex 35 ha cerrado en 8.695 puntos, con una pérdida del 1,2 por ciento. Hoy ha sido el índice más débil de toda Europa. En el conjunto de la semana acumula una caída del 1,9 por ciento, lo que reducir la revalorización en el conjunto del año a menos del 8 por ciento. Hoy se han salvado pocos valores. Entre ellos Repsol y las empresas acereras. En otro platillo de la balanza destacan los recortes que han sufrido la aerolínea hispano británica IAG y el gestor de aeropuertos AENA, tras la suspensión del ambicioso proyecto de ampliación del aeropuerto de El Prat en Barcelona. Es un proyecto de 1.700 millones de euros que, de momento, se queda en el limbo.

Muy estable ha cerrado Naturgy, que termina la semana por debajo del precio de la OPA del fondo australiano IFM, lo que indica que los inversores no esperan que se aumente el precio de la oferta ni que surja una OPA competidora. Sin embargo, si Criteria (el brazo inversor de Caixabank) aumenta su participación en Naturgy (que actualmente alcanza el 26 por ciento), entonces seguramente el precio de mercado se colocará por encima del precio de la OPA, lo que puede dar al traste con la operación.

Muchos inversores temen una próxima corrección en la Bolsa de Nueva York, aunque pocos son los que se atreven a tomar fuertes posiciones bajistas en este mercado. Así que, de momento, las Bolsas siguen subiendo peldaños. Hay mucho dinero en el sistema financiero y pocas inversiones rentables encima de la mesa. Esta tarde Wall Street opera con ganancias en el índice Nasdaq de empresas tecnológicas, con poco movimiento en el S&P 500 y con ligeras pérdidas en el Dow Jones de valores industriales. Los tres se encuentran muy cerca de sus máximos históricos.

Dentro de casa, los mercados toman nota de una referencia importante, como es que ya se están constituyendo más sociedades que antes de la pandemia, mientras se reduce el número de concursos de acreedores. Y otro dato. Las empresas europeas cuentan en estos momentos con niveles de liquidez nunca antes vistos. Las compañías no financieras tienen 3,2 billones de euros en la faldriquera, según los datos que maneja el Banco Central Europeo. Hace año y medio esa cantidad era 600.000 millones más baja.

En los demás mercados, sube el petróleo, a pesar de que. China venderá parte de sus reservas de crudo para frenar la subida de los precios de los carburantes, algo que hizo hace poco Estados Unidos. Los inventarios de crudo de la Agencia Internacional de la Energía se redujeron la semana pasada en un millón y medio de barriles, cuando el mercado estaba esperando una cifra superior a los 4 millones. Por el contrario, las reservas de productos destilados y de gasolina se han reducido bastante más de lo que se esperaba. El crudo del Mar del Norte roza los 73 dólares, mientras el West Texas de Estados Unidos se acerca a los 70.

El oro se negocia ligeramente por debajo de 1.800 dólares por onza. En el mercado secundario de deuda, el rendimiento de las obligaciones españolas a diez años ha bajado al 0,32 por ciento, mientras el “bund” alemán ofrece un rendimiento negativo del menos 0,33 por ciento. Desde hace mucho tiempo Alemania cobra a los inversores que colocan su dinero en sus bonos a este plazo. Por su parte, los bonos de Estados Unidos rinden un 1,33 por ciento. El euro ha repuntado puntualmente en las últimas horas, pero sigue relativamente débil. Se cambia esta tarde por 1,1830 dólares. El Bitcoin, muy volátil, ha bajado mil quinientos dólares en las últimas horas. Cotiza esta tarde en torno a 45.000 dólares.