La intensa reacción alcista de los valores energéticos impulsa a la Bolsa por encima de los 7.100 puntos

Tras los duros ajustes de la semana pasada, los inversores se han animado a volver al mercado con paso firme para aprovechar los bajos precios de muchas de las cotizadas españolas.

Dicen algunos expertos que la autorización de la FDA, el máximo organismo sanitario en Estados Unidos, a la utilización del plasma como tratamiento de urgencia contra los enfermos graves ha sido el detonante de esta mayor confianza. No obstante, parece un argumento poco sólido por sí solo.

Los principales mercados norteamericanos vienen registrando máximo tras máximo en las últimas sesiones más pendientes de los buenos resultados empresariales futuros y del potencial tecnológico para afrontar la crisis que en posibles remedios de urgencia contra la pandemia. Aunque todo ayuda.

En el caso de España, la AIReF, Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal, ha apuntado a que la economía española rebotará con fuerza en el tercer trimestre, calcula un crecimiento del 15,2 por ciento, después de la histórica caída del 18,5 por ciento registrada en el segundo trimestre por el confinamiento. Este avance pondría fin a la breve recesión en la que entró el país en el segundo trimestre.

Con todo, el intenso impacto que ha tenido la pandemia en la actividad económica impedirá cerrar el año en positivo, con una caída prevista por el Gobierno para el conjunto del año del 9,2%. En sus últimas previsiones de julio, la AIReF elevó esa contracción a una horquilla de entre el 10,1% y el 12,4%, dependiendo de si fuera necesario un nuevo confinamiento o solo hubiera brotes locales de Covid-19.

En este contexto, el índice Ibex 35 ha ganado un 1,8 por ciento, para cerrar ligeramente por encima de los 7.100 puntos.

El protagonismo de la sesión lo ha acaparado el sector energético liderado por Repsol con un alza del 4,8 por ciento. El precio del petróleo ha repuntado con rapidez, en las últimas horas ha repuntado hasta los 45,5 dólares por barril, pendiente de la paralización de la producción de parte de la producción en el Golfo de México por la formación del huracán Marco.

A la fiesta alcista se han sumado Acciona y Naturgy con avances del orden del 3,5 por ciento. Dentro del sector financiero ha destacado el rebote del 3,9 por ciento del Santander después de rozar mínimos del año la semana pasada.

También ha sido un buen día para Grifols, aunque menos de lo que se podría pensar en la apertura. El fabricante de plasma ha subido un 1,6 por ciento, después de que la FDA haya aprobado el uso de plasma para enfermos por coronavirus como medida de urgencia.

En el mercado de divisas, el euro se ha mantenido débil en 1,18 dólares después de la debilidad mostrada el pasado viernes tras unos decepcionantes indicadores de PMI en la Euro Zona frente a la mayor fortaleza que sigue mostrando la economía norteamericana.

El oro, entre tanto, ha vuelto a ganar altura, aunque sin demasiada convicción pendiente de la recuperación de los mercados de renta variable. La onza se ha llegado a pagar a cerca de 2.000 dólares en el mejor momento de la sesión, aunque al final ha flojeado para buscar acomodo sobre los 1.950 dólares.