¿Qué puedo hacer antes de que acabe el año para pagar menos en la Declaración de la Renta de 2022?

La cuenta atrás para despedir el 2022 ya ha comenzado. Ha sido un año marcado por el comienzo de la guerra de Ucrania y una situación realmente complicada a nivel económico. En este punto del año, algunos ya piensan en la Declaración de la Renta que debemos presentar en unos meses, y que supone un trámite anual para muchos en los que regularizar nuestra situación con la Agencia Tributaria.

A dos semanas de que termine el año, podemos tener en cuenta algunos consejos con lo que conseguiremos ahorrar un buen pellizco en este ejercicio, en concreto puede suponer un ahorro de más de 3.000 euros.

Cuatro claves para ahorrar en la Declaración de 2022

En primer lugar, nos fijamos en la energía, ya que aquellos que hayan invertido en su hogar, haciendo obras para mejorar la eficiencia energética debido a los precios desbocados, pueden tener una importante deducción. Arturo Jiménez, de la Asociación Española de Asesores Fiscales, explica el requisito principal: "Siempre cuando tengamos una certificación específica antes de que finalice el año, que nos certificase que realmente tenemos un ahorro energético".

Por un lado, si la obra permite reducir la demanda de calefacción y refrigeración en un 7%, las deducciones posibles son del 20% del coste de las obras, con una base máxima de 5.000 euros. En caso de que el ahorro alcance el 30 %, la deducción será del 40 % hasta un máximo de 7.500 euros. También hay que tener en cuenta que, en el caso de edificios residenciales, si las obras permiten reducir un 30 % el consumo de energía, los titulares de las viviendas podrán deducirse hasta un 60 % de la inversión, con un máximo de 15.000 euros.

Por otro lado, ponemos el foco en los planes de pensiones. En este sentido, conviene aprovechar las deducciones por aportación a los planes con un límite de 1.500 euros en los individuales y de hasta 8.500 en los empresariales. Teniendo esto en cuenta, el ahorro en el caso de los individuales iría desde los 285 euros a los 675.

Otro de los aspectos que debemos tener en cuenta son las donaciones. Cuentan con una deducción del 80% de los primeros 150 euros y del 35% a partir de esa cantidad, cuando sean a entidades sin ánimo de lucro. Además, aquellas aportaciones a sindicatos y colegios profesionales también cuentan con beneficios fiscales.

Por último, nos fijamos en la compra de vivienda. Aquellos contribuyentes que compraron su vivienda habitual antes de 2013 pueden deducirse el 15% de los pagos por intereses y amortización del préstamo hasta un máximo de 9.040 euros. Esto supondría una devolución de 1.356 euros.

Teniendo estos cuatro aspectos clave en cuenta, y buscando el mayor ahorro posible al cierre del año, los expertos aconsejan hacer la aportación máxima siempre que los ahorros lo permitan.