Esta es la temperatura a la que debes poner tu lavadora para ahorrar en tu factura de la luz: lo dicen los expertos

El gasto de los electrodomésticos vampirizan buena parte de nuestra factura de la luz. En general  representan aproximadamente el 30% del consumo mundial de energía. Llevándolo a nuestro bolsillo nos supone el 55% de la energía eléctrica que gastamos en casa, según recoge la OCU. 

Una familia española gasta solo en electrodomésticos entre 3.500 y 5.700 kWh al año.  Con un precio medio de electricidad a 0,30 €/kWh, nos supone un gasto anual de entre 1.000 y 1.700 euros.  

Controlar el precio kilowatio/hora no está a nuestro alcance, pero sí el poner en práctica pequeños gestos que nos permitan optimizar nuestro recibo eléctrico. Y hay muchos. 

35 euros menos al año

Optar por aparatos más eficientes, es uno de ellos. Un electrodoméstico que no gaste tanta energía supone un ahorro medio de 35 euros al año en electricidad, según apunta la OCU.  Puede no parecer gran cantidad pero si lo multiplicamos por una vida útil de 10 años, son ya 350 euros. 

Conocer  la eficiencia es sencillo. Basta con mirar la etiqueta energética que incorporan y que los identifica  en una escala con letras que oscilan desde la A hasta la G, siendo la etiqueta A la de mayor eficiencia y la G la de menor.

Cambiar por tanto nuestro viejo aparato por uno que consuma menos puede contribuir a restar números en nuestra factura energética.

Pero además de la antigüedad, hay otros hábitos interesantes a la hora de usar cada aparato en nuestra rutina diaria. 

lavadora y temperatura

De entre todos los grandes electrodomésticos,  la lavadora es uno de los que más utilizamos, al menos cuatro veces de media por semana. La OCU estima un gasto de 33 céntimos cada vez que la ponemos en marcha, lo que nos supone más de cinco euros al mes. 

Modelos eficientes tienen un impacto en nuestro ahorro, pero también  la temperatura del agua. Recuerda que el momento en que más consume es cuando la calienta. 

Atrás queda el tiempo en el que las altas temperaturas de hasta 60 grados mejoraban la calidad del lavado. Las nuevas generaciones ofrecen lavados igual de eficaces pero con temperaturas sensiblemente más bajas y más baratas. 

De esta manera, lavar a 40°C en vez de a 60°C hará que la lavadora consuma hasta "un 40% menos de electricidad", según explican los expertos de OCU. Además es un paso eficaz para reducir las emisiones de carbono. 

ROPA SUCIA, LAVADORA LLENA y horas valle

Separar la ropa según su grado de suciedad nos permite seleccionar incluso una temperatura inferior a los 40 grados, incluso un lavado en frío.  También, si la ropa no está demasiado sucia, es mejor elegir programas más cortos para reducir el consumo. 

Hoy en día si buscamos en internet podremos saber cuáles son las horas valle, es decir aquellas en las que poner en marcha la lavadora sale más económico. Así que si tienes contratada una tarifa eléctrica por tramos, infórmate y aprovéchala. 

Y siempre pon la lavadora cuando esté lleva. Muchas veces las prisas o la urgencia para ponernos alguna prenda nos lleva a ponerla en marcha con la mitad de carga. Siempre es más rentable  una llena que dos a la mitad. Si llenas la lavadora al 95% en lugar de al 80%, ahorrarás no solo luz, también más de 1.800 litros de agua. 

Con todo esto, salvo que tu ropa esté rematadamente sucia, no sale a cuenta pulsar el botón del prelavado. De esta manera solo conseguiremos aumentar el tiempo de lavado... y el coste energético. 

También si eliges un ciclo de centrifugado más rápido, la ropa saldrá más seca y te ahorrarás el gasto en secadora, si es que la usas.  

Un buen mantenimiento también es importante porque consumirá menos luz. Así que de vez en cuando no está de más limpiar el filtro y la goma del aparato. 

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