Casado asegura que Sánchez quiere destrozar la unidad de España

El presidente del PP, Pablo Casado, ha asegurado este domingo que Pedro Sánchez es "el presidente más radical" de la historia de España y su gobierno el más "desigualitario" porque quiere "destrozar la economía, dar prebendas a los independentistas, acercar presos y destrozar la unidad nacional" y el PP no se lo va a permitir, ha dicho.

En un acto en Vigo, acompañado entre otros por Alberto Núñez Feijóo y Ana Pastor, el líder del PP ha cargado contra un hipotético gobierno de Pedro Sánchez y Pablo Iglesias porque es "una aventura" que España no puede pagar.

"No podemos pagarlo. Si llegan al gobierno los comunistas de Podemos tendremos otra recesión (...) como las que dejaron Felipe González y José Luis Rodríguez Zapatero", ha dicho, tras recordar que el Banco de España ha cifrado en unos 12.000 millones de euros el desvío en el déficit con las medidas del Gobierno.

Frente a esta situación, Casado ha reivindicado al PP como "única alternativa" y ha insistido en la necesidad del voto "unido" a su partido; "no desunir el voto para no desunir España", ha asegurado.

"Algunos dirán que ya están con el voto del miedo o con el voto útil; no, es el voto unido. Apelamos a unir el voto para unir a España", ha dicho tras asegurar que en unas veinte provincias, "donde se juegan un tercio de los escaños", los votos a algunas fuerzas pueden quedar sin representación por el sistema electoral.

"No necesitamos a tres que hagan algo, sino a uno que haga lo que haya que hacer, que lo haya hecho antes y que esté dispuesto a hacerlo cueste lo que cueste", ha dicho sin mencionar a Ciudadanos y a Vox.

Durante su intervención, sin embargo, sí ha criticado las propuesta de algunos de estos partidos como llevar armas o sus alusiones al patriotismo o el fichaje de tránsfugas; mientras que el PP habla de lo que interesa a los ciudadanos, ha dicho, como el empleo, la sanidad y la educación, entre otros temas.

Casado ha mencionado el regreso del líder de Podemos, Pablo Iglesias, y también el mitin protagonizado por Santiago Abascal, sobre quienes, ha ironizado "ya estamos todos los caballos en el hipódromo", aunque ha reivindicado que él lleva meses recorriendo toda España.

También ha aludido en su intervención las encuestas que en los últimos días, y también este domingo, se están publicando y que "dicen que en votos sumamos (PP, Vox y Ciudadanos) una alternativa al gobierno de comunistas, socialistas e independentistas" pero no en escaños, por lo que ha insistido en votar al PP y ha recordado la ley electoral.

Ha centrado gran parte de sus críticas en la política económica de Gobierno socialista en estos ocho meses y ha alertado de las consecuencias de su continuidad en el caso de que Pedro Sánchez consiguiera mantenerse en la Moncloa y con un mayor apoyo de la fuerza de Iglesias.

"Ya enseñaron la patita con los presupuestos, pretendían 6.000 millones más de gasto público, subir impuestos... ¿Qué país puede aguantar eso en plena desaceleración económica internacional", se ha preguntado.

Además, ha censurado las políticas industriales, con efectos sobre el empleo en sectores como la automoción y otros apoyados en los costes energéticos.

Casado ha reivindicado, además, a Alberto Núñez Feijóo y al PP de Galicia, y ha vuelto a señalar que el dirigente gallego será "lo que quiera, cuando quiera y como quiera" si él es presidente de España.

Ha destacado que Feijóo es un gran defensor del estado autonómico "pero al mismo tiempo como parte del esqueleto de una gran nación".

Núñez Feijóo, que ha intervenido antes, ha asegurado que Vox y Ciudadanos son "la división del voto para que a Pedro Sánchez le puedan salir las cuentas" para volver a gobernar tras las elecciones del 28 de abril.

En su opinión, "no es de extrañar" que Sánchez "esté encantado con Ciudadanos y Vox" porque "votar a estos partidos le favorece".

Feijóo ha lamentado que estas dos formaciones "critican mucho más" al PP que a Pedro Sánchez y que, además, "de vez en cuando sueltan un disparate tan grande que ocultan el disparate" de que el líder socialista siga en Moncloa.