La lucha entre Margallo y Santamaría por la aplicación del 155

El próximo 20 de julio veremos la primera prueba para los siete contrincantes que aspiran a presidir el Partido Popular. Dos de ellos, pesos pesados del anterior Ejecutivo de Mariano Rajoy, ya han mostrado sus pequeñas rivalidades ante los micrófonos de COPE: José Manuel García Margallo y Soraya Sáenz de Santamaría.

Una de las cuestiones en las que discreparon en su momento fue la aplicación del artículo 155 de Cataluña. La vicepresidenta del anterior gobierno negoció su puesta en marcha con los otros dos partidos constitucionalistas, Ciudadanos y PSOE, pero al ex ministro no pareció gustarle en exceso el resultado final:

“Después de dos bombas nucleares como fueron la Declaración Unilateral de Independencia y el 155, la situación sigue siendo igual que antes de las elecciones. Viviremos una etapa de inestabilidad, incertidumbre y empobrecimiento de Cataluña”, afirmaba ante los medios en diciembre del año pasado.

Pero apenas medio año después, en Intereconomía, daba un paso más allá y llegaba a afirmar que discrepaba con Soraya “en todo”, porque fue él quien propuso el artículo 155 en 2014. No le hicieron caso, así que presentó a Rajoy “una reforma de la constitución y un libro sobre la financiación autonómica”.

El ex ministro de Exteriores ya había mostrado sus discrepancias con la propuesta que presentó Soraya para la presidencia. “No es mi candidata. Respeto su personalidad, su trabajo, su capacidad de orden, pero estratégicamente, coincidimos muy poco. Creo que esto arranca de muy lejos", ha señalado.

Soraya Saénz de Santamaría, sin embargo, no se ha prodigado en respuestas ante todos estos "ataques". La única pulla que le tiró fue en esta cadena, en COPE, cuando Herrera le preguntó qué le había pasado a su relación con Margallo. La candidata popular tenía que responder con una onomatopeya, pero terminó contestando con otra pregunta. "¿Conoce usted al señor Margallo?", le preguntó a Herrera. "Tengo el gusto", le confesó. "Pues ya está", afirmaba ella con una sonrisa.