Un rato en el supermercado

Es miércoles, quinto día del Estado de Alarma, pero necesitamos algunas cosas, víveres esenciales y hemos ido al súper.

Limitación de aforo y guantes y desinfectante para clientes

Son las 11,15 de la mañana, y el goteo de clientes es incesante. No hay aglomeración, pero sí más compradores de los que esperaba. El aspecto de este Carrefour de Hortaleza en Madrid es diferente. Está dentro de un centro comercial y todas sus puertas están cerradas excepto la que da acceso a la planta baja, la entrada a la zona de alimentación de esta gran superficie, y la subida desde el garaje. Un grupo de unas 10 personas con mascarillas y guantes espera a los clientes y uno a uno limpian el carro y, les ofrecen guantes y gel para las manos.

El metro de la discordia

Les paran a cierta distancia uno de otro, les explican que deben alejarse un mínimo de un metro de otra persona y que sobre todo no pueden ir en grupo, sólo una persona puede entrar a comprar. Algunos se incomodan, pero el director de la tienda José Casado Ruiz, nos explica que “es prioritario salvaguardar la salud de nuestros empleados y de nuestros clientes. Seguimos las instrucciones de la Policía Municipal” Un gran cartel avisa de ello junto a otro que recuerda que las personas mayores tienen prioridad para hacer la compra entre 9 y 10 de la mañana. Se ha cerrado la zona donde están los productos que no son de primera necesidad, sólo están abiertas las de comida y limpieza.

Mamparas en las cajas

Todo el personal lleva mascarillas, guantes, tienen su propio gel para desinfectarse las manos y hay mamparas transparentes que se han puesto contrarreloj “para proteger a las cajeras y a quienes están en contacto con los clientes”. Se ven menos cajas abiertas, las que están operativas se encuentra a bastante distancia una de otras, mientras que ante los mostradores unas líneas indican donde se deben colocar los compradores para dejar el espacio necesario. Se han cambiado algunos turnos porque desde que se decretó el estado de alarma se cierra una hora antes y algunos empleados han pasado a reforzar la reposición. “No hay faltantes, insiste José Casado, no hay problemas ni aglomeraciones, se debe venir a comprar ordenadamente”.