Sánchez deja huérfana la Ley de Memoria dos días antes de aprobarla y pasa a manos del 'fontanero' Bolaños
Carmen Calvo daba por buenas hace sólo unos días las recomendaciones del CGPJ para una ley de la que ha sido la promotora y que ahora deja en otras manos
Madrid - Publicado el - Actualizado
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Uno de los efectos más inmediatos de la remodelación “profunda” que ha realizado Sánchez de su gobierno este sábado ha sido dejar huérfana la Ley de Memoria Democrática de la que la ya ex vicepresidenta primera, Carmen Calvo, era la principal valedora y en la que ha trabajado más de un año. Un testigo que ahora recoge quien será su sustituto como ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, y quien ha sido el principal negociador de Sánchez en asuntos tan delicados como la exhumación de Franco o la mesa de negociación con la Generalitat.
Un proyecto de ley del que Calvo se aleja tan sólo tres días antes de que sea, previsiblemente, aprobado por el Consejo de Ministros este martes. Concretamente la propia ex ministra defendía el texto hace sólo unas semanas tras las recomendaciones del Consejo General del Poder Judicial en un informe no vinculante del 7 de junio. Unas directrices en las que el organismo de jueces advertían de que perseguir la apología del franquismo "sin el requisito adicional del menosprecio o humillación a las víctimas" podía entrar en contradicción con el amparo constitucional a la libertad de expresión.
Además, el CGPJ apuntaba que prohibir manifestaciones de este signo político podía chocar con la doctrina del Tribunal Constitucional sobre el derecho de reunión. Igualmente, Moncloa ya ha advertido de que mantendrá en la Ley de Memoria Democrática la prohibición de hacer apología del franquismo: “Hemos buscado una fórmula donde se mantiene que no se puede enaltecer el franquismo y el dictador, y que estas víctimas reciben vilipendio cuando esto pasa”, aseguraba Calvo en rueda de prensa.
La Ley de Memoria, en manos de Bolaños
Ahora el testigo lo recoge Bolaños como ministro de Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática y, mientras previsiblemente la ley seguirá el mismo trayecto que hasta ahora y el texto siga las mismas pautas, el proyecto tendrá que pasar el filtro de las Cortes Parlamentarias para su aprobación. Y es que Félix Bolaños ha sido una suerte de 'fontanero' para Pedro Sánchez, el negociador en la sombra.
Uno de los casos más notorios ha sido en la exhumación de Franco del Valle de los Caídos, donde el ahora ministro de la Presidencia ejerció como negociador entre el Ejecutivo la familia del dictador. Así mismo, Bolaños fue el encargado de diseñar todo el operativo para el traslado de los restos hasta el cementerio de El Pardo - Migorrubio.
Además, en la lista de méritos del nuevo hombre fuerte del Ejecutivo está haber sido el enlace entre Presidencia y Esquerra Republicana para la negociación de los indultos de los presos del procés, así como hombre de conexión para la mesa de diálogo con los independentistas. Además, es notoria la buena sintonía que existe entre Félix Bolaños y la actual secretaria general de Podemos, Ione Belarra, con quien ya coincidió en la mesa de negociación con Echenique, a quien llegó a regalar dos agendas oficiales de Moncloa.