El control de RTVE y las facturas de Sánchez

El Congreso ha convalidado el real decreto ley que, con carácter urgente, presentó el PSOE para la renovación del Consejo de Administración de Radio Televisión Española. El PSOE está manteniendo todos los apoyos que obtuvo en la moción de censura. Persistía una pequeña incógnita sobre la lista de los consejeros que habían pactado previamente el PSOE con Podemos y el PNV con otros grupos minoritarios, en espera de lo que decidieran los diputados de Esquerra, cuyo voto era necesario para alcanzar la mayoría necesaria. Pero bastó la oportuna intervención de la ministra Batet, que lleva la agenda del encuentro entre Sánchez y Torra, para disipar todas las incógnitas. No habrá “cortapisa” alguna para abordar en el diálogo las exigencias del presidente de la Generalitat.

En suma, la cadena pública de Radio-Televisión estará sometida al control absoluto de un Consejo designado por PSOE, Podemos y PNV, en el que no han tenido arte ni parte los representantes de la mitad de la sociedad española, o sea PP y Ciudadanos. Es una pésima noticia para la calidad de nuestro sistema democrático y para el funcionamiento de una radio y una televisión que son de todos los españoles.

En realidad lo que estamos viendo es consecuencia de la forma en que Sánchez ha llegado al Gobierno, mediante una moción de censura en la que no ha dudado en requerir el apoyo de la extrema izquierda y de los independentistas. Un apoyo que, lógicamente, no podía ser gratuito, y que ahora pasa sus facturas al cobro. La tremenda debilidad de Sánchez la pagan las instituciones y el propio sistema democrático.