Línea editorial 17/12/2024
El coste de la posible corrupción
Las declaraciones de Ábalos, Aldama y Koldo ante el Tribunal Supremo sobre la presunta trama de corrupción que habrían protagonizado no fijan todavía la verdad jurídica del caso
Madrid - Publicado el
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Las declaraciones de Ábalos, Aldama y Koldo ante el Tribunal Supremo sobre la presunta trama de corrupción que habrían protagonizado no fijan todavía la verdad jurídica del caso. Las declaraciones de Aldama apuntan a obras que se habrían adjudicado después del pago de comisiones ilegales a intermediarios y al PSOE para su financiación. Algunas fotos certifican que el comisionista tenía una relación con cuadros del PSOE y con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, que en su momento se quiso negar. Los jueces tienen por delante un largo trabajo para determinar la verdad de lo sostenido por Aldama. El caso no se resolverá en pocos meses. Pero de momento los magistrados y los fiscales han considerado que es necesario seguir adelante en la investigación.
El hecho de que se investigue no prejuzga nada. Pero las sospechas que aparecen debilitan ya la confianza en los poderes públicos. España, en los rankings de percepción de la corrupción, está peor considerada que países de su entorno como Alemania, Austria o Francia. Estamos por debajo de Chile o de Uruguay. Esta percepción sobre el estado de la corrupción genera dos problemas serios. Encarece las transacciones económicas porque aumenta la percepción de riesgo para las inversiones. Y, por otra parte, aumenta la fractura entre la opinión pública y los partidos. Nuestra democracia se hace menos digna de crédito en un momento muy delicado en el que el prestigio de las instituciones, especialmente entre los jóvenes, desciende.