Mundo digital y menores
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Madrid - Publicado el - Actualizado
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El impacto de la tecnología digital en los niños se ha convertido en una de las principales preocupaciones no solo de los padres y de los maestros, también de los profesionales de la salud. El universo digital es como un arroyo en el que la sociedad está bebiendo y del que estamos dando a beber a las nuevas generaciones sin ser del todo conscientes de que el arroyo está contaminado. El informe del Comité de personas expertas para el desarrollo de un entorno digital seguro para la infancia y la juventud, aprobado por el Consejo de Ministros, puede ser una buena oportunidad para que la sociedad reaccione ante los efectos del acceso libre a las pantallas tanto en el desarrollo neuromotor como en la capacidad de relación social, la gestión de las emociones, las prácticas de concentración o la erosión de aspectos básicos de la personalidad por la sobreexposición imitativa en las redes, entre otros factores negativos.
Los autores del Informe gubernamental plantean 107 propuestas en ámbitos muy dispares. Si bien no existen recetas fáciles, hay que tener en cuenta que Australia ha promovido hace poco una ley de prohibición de acceso a las redes sociales a menores de 16 años. También están ya activas en algunos países medidas de prohibición de los dispositivos en centros escolares, principalmente en infantil y primaria. Cuando de la educación se trata, más vale siempre prevenir que prohibir. Ante prácticas normalizadas como el uso indiscriminado de la tecnología, la base es la educación integral de la persona que pasa por una propuesta de criterios éticos básicos, que permita discernir el uso correcto o incorrecto de los dispositivos.