La ciudadanía de Georgia merece una respuesta de Europa
"El goteo de tímidas protestas proeuropeas en Georgia se ha convertido en un masivo movimiento que recuerda al Maidan en Ucrania"
Madrid - Publicado el
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El goteo de tímidas protestas pro europeas en Georgia se ha convertido en un masivo movimiento que recuerda al Maidan en Ucrania. La primera chispa se produjo con las denuncias por fraude en las elecciones de octubre. Lo que ha provocado el incendio ha sido, sin embargo, la decisión tomada la semana pasada por el Gobierno de suspender las negociaciones de adhesión a la UE. La represión policial contra los manifestantes ha motivado la dimisión de varios altos cargos y embajadores, a los que se suma la carta de protesta de miles de funcionarios. La presidenta, un cargo más bien simbólico, se ha posicionado a favor de los manifestantes. Hay grietas en el régimen. Con todo, el Gobierno parece tener la situación bajo control, con unas fuerzas de seguridad entrenadas por la OTAN y hasta ahora leales al régimen.
Todo apunta a que se trata de una jugada bien planificada del hombre fuerte del país, un oligarca próximo al Kremlin que mueve los hilos en el partido gobernante. La falta de referentes en la oposición resulta útil para sus propósitos. La cuestión es que la ciudadanía no se amilana, pese a la represión y las amenazas del Gobierno de una nueva invasión rusa, como en 2008. Para los Veintisiete esta es una nueva prueba de credibilidad. Una vez más salen a la calle en el antiguo espacio soviético miles de personas blandiendo las banderas de Europa y de la libertad. Este es seguramente un choque que, de un modo u otro, veremos repetirse en distintos escenarios en los próximos años. La pregunta es qué espera hacer Europa al respecto.