El estadio Calderón será polvo y recuerdo en solo dos semanas

Los vecinos de la zona del antiguo estadio del Atleti se quejan del fuerte ruido y de las nubes de polvo que levanta esta enorme obra de ingeniería

El estadio Calderón será polvo y recuerdo en solo dos semanas

Ramón García Pelegrín

Madrid - Publicado el - Actualizado

3 min lectura

Mediados de junio. En esas fechas tan cercanas, el estadio Vicente Calderón pasará definitivamente a la historia del fútbol y de la música, no en vano por allí lucieron palmito y voz desde Paul McCartney montado en la alfombra mágica de la nostalgia beatle, Mick Jagger y sus secuaces, el Boss Springsteen y su E Street Band, Bono con los guitarreos imposibles de The Edge al frente de U2 o Mark Knopfler liderando Dire Straits, y así toda una larga y estratosférica nómina del rock.

En solo algo más de dos semanas, el estadio Vicente Calderón quedará reducido a cenizas. Lo poco que aún sigue en pie de la grada cero (la más próxima al río Manzanares) será un solar a mediados de junio, tal y como confirman a COPE fuentes del Área de Obras y Equipamientos del Ayuntamiento de Madrid que, aseguran, se está teniendo un especial cuidado para que ningún escombro caiga al Manzanares, algo que preocupa mucho a vecinos y organizaciones ecologistas.

Sin ninguna piedad, dos inmensas excavadoras de ataque frontal están acabando con la última parte del esqueleto del legendario estadio atlético y de su medio siglo de leyenda. Una vez derruida esa grada cero en junio, el siguiente paso será la cubrición del tramo de la M30 que discurría por debajo del estadio. El proyecto ya está entregado, cuentan a COPE fuentes municipales; tras la correspondiente licitación, la obra comenzaría a finales de año o principios de 2021. Además, el consistorio quiere agilizar al máximo las obras de construcción, tanto de las dos urbanizaciones residenciales con 340 viviendas en los terrenos del Calderón, como los edificios en el desarrollo urbanístico que ocupa el solar de la Mahou, donde antaño se erguía esta factoría de cerveza.

En pleno confinamiento y estado de alarma, hay que tener mucho temple y nervios de acero para soportar ocho horas ocho diarias de ruido, camiones por doquier y polvo, mucho polvo (aunque los chorros de agua son constantes por parte de los operarios para que no se levante tanta polvareda). Así las cosas, los vecinos de toda esta zona próxima a Madrid Río se quejan. “Tras las dos semanas que estuvieron paradas las obras y cuando se reanudaron, el tráfico rodado de vehículos pesados bajó bastante. En cuanto a lo que se nos viene encima ya en los próximos días, estamos muy preocupados en toda la zona. Vamos a tener las ventanas abiertas por el calor y habrá mucho ruido y mucho polvo en suspensión porque las obras no van a parar. Esperamos que se tomen medidas para reducir el impacto”, afirma a COPE la presidenta de la Asociación de vecinos Pasillo Verde-Imperial, Maite Gómez.

Por si la obra del estadio Calderón supusiera poco trastorno para estos atribulados vecinos, a ese tsunami se le suma la obra en el solar de la Mahou. Noventa mil metros cuadrados patas arriba en el barrio. “Otro aspecto que nos viene fatal con el cambio de fase es la existencia de una valla en todo el perímetro de la obra de Mahou y que invade las aceras en muchos sitios. Por lo que es muy difícil guardar la distancia de seguridad cuando te cruzas con alguien”, puntualiza Maite Gómez.

Temas relacionados

Programas

Último boletín

13:00H | 24 NOV 2024 | BOLETÍN