La nutricionista Sandra Moñino avisa a los que toman miel en el desayuno por un detalle en su composición: el 80%

En su pódcast 'Con Jengibre y Limón' junto a María Pérez Espín, la experta en nutrición advierte de un uso que no debe de hacerse con la miel, además de cuál es la mejor para consumir

Sandra Moñino advierte de algo que hay que saber de la miel

Sandra Moñino advierte de algo que hay que saber de la miel

Luis Calabor

Madrid - Publicado el

3 min lectura

La miel es uno de los alimentos estrella en los desayunos de muchos hogares. Su sabor dulce y su origen natural la convierten en una opción aparentemente saludable para acompañar tostadas, yogures o infusiones. Además, su versatilidad culinaria y sus propiedades asociadas a la tradición la han hecho ganarse un lugar en la mesa como una alternativa más “natural” al azúcar refinado.

Sin embargo, no todo lo que reluce es oro, ni toda miel es igual. Durante su participación en el podcast Con Jengibre y Limón, junto a María Pérez Espín, la nutricionista Sandra Moñino, quien ha ganado especial repercusión por su reto de 3 días de alimentación antiinflamatoria, arroja luz sobre aspectos clave que los consumidores deben tener en cuenta antes de incorporar la miel de forma habitual a su dieta. Según Moñino, es fundamental diferenciar entre la miel procesada, que se encuentra en supermercados, y la miel cruda o virgen, que conserva sus propiedades naturales.

EL PROBLEMA OCULTO QUE TIENE LA MIEL EN LA SALUD

La experta en nutrición destaca que la miel cruda, conocida también como miel virgen, es aquella que no ha sido sometida a procesos industriales. “Siempre digo: cruda, y la gente pregunta: ‘¿qué significa cruda?’ Es la que proviene directamente del panal, sin manipulación. Esa miel buena, auténtica, tiende a solidificarse con el frío, lo que indica que no ha sido tratada químicamente”, explica Moñino. No obstante, incluso esta versión más pura requiere precaución en su consumo.

Tarro de miel

Pixabay

La miel es un elemento esencial en muchas despensas

A pesar de su reputación como alimento natural, Moñino hizo hincapié en un detalle que muchos desconocen: el 80% de la miel es azúcar. “Al final, la miel actúa como un azúcar. Aunque prefiero que se utilice miel en lugar de azúcar refinado o edulcorantes artificiales, no deja de ser un endulzante que debe consumirse con moderación”, advirtió. Este alto contenido en azúcares simples, como la fructosa y la glucosa, puede contribuir al aumento de peso, desajustes en los niveles de glucosa en sangre y otros problemas metabólicos si se toma en exceso.

Por este motivo, Moñino aconseja no consumir miel de forma habitual. “Puedes usarla en momentos puntuales, pero con el objetivo de reducir su consumo poco a poco hasta acostumbrarte a sabores menos dulces. Lo ideal sería endulzar de manera natural con fruta, canela o coco, o incluso aprender a disfrutar de los alimentos sin necesidad de endulzarlos”, afirmó.

LA MANERA CORRECTA DE INTEGRAR LA MIEL EN UNA DIETA SALUDABLE

La nutricionista resalta que no se trata de eliminar completamente la miel de la dieta, sino de consumirla con consciencia. Una cucharada ocasional en un yogur, café o infusión puede ser parte de una dieta equilibrada, siempre que no se convierta en un hábito diario. Según señala Sandra Moñino, este enfoque es especialmente importante en un mundo donde los productos ultraprocesados y los edulcorantes artificiales son cada vez más comunes.

Imagen de archivo

Canva

Hay que tener cuidado con la cantidad de azúcar que contiene la miel

Igualmente, la miel sigue siendo un complemento interesante en la cocina y una alternativa más saludable frente a otros endulzantes, pero su consumo debe ser controlado. Optar por miel cruda de calidad y usarla de manera esporádica son los pasos clave para aprovechar sus beneficios sin exponerse a los riesgos asociados a su alto contenido en azúcar.

Temas relacionados

Herrera en COPE

Herrera en COPE

Con Carlos Herrera

Lunes a viernes de 06:00h a 13:00h

Programas

LOS ÚLTIMOS AUDIOS

Último boletín

18:00H | 22 ENE 2025 | BOLETÍN