Casi 60.000 hectáreas han sido arrasadas por las llamas en 2019

En lo que va de año, hasta el 28 de julio, el fuego ha calcinado un total de casi 60,000 hectáreas. O, lo que es lo mismo, alrededor de 100.000 campos de fútbol, o toda el área metropolitana de la ciudad de Madrid. Estas cifras son cinco veces mayores a las del mismo periodo del año anterior, la quinta peor cifra de los últimos 10 años.

El sonido de los camiones de bomberos y de los servicios aéreos de extinción de incendios se han convertido en un sonido recurrente en lo que llevamos de año, sobre todo en verano. En total se han producido desde enero casi 8.000 fuegos. Unos datos que no son especialmente alarmantes en comparación con los del último decenio, pero que sí que distan mucho de las buenas cifras registradas el pasado año donde, a estas alturas, la cantidad de incendios forestales apenas sobrepasaban los 3.000.

No en vano, las causas de los incendios suelen variar, a veces producidos por chispas o por rayos en tormentas eléctricas de verano, pero también, muchas veces, se tratan de incendios provocados por pirómanos. El caso más reciente que hemos conocido es el de Barcelona, donde han pillado in fraganti a un presunto pirómano cuando intentaba prender fuego a un bosque con una mecha y cerillas. Se cree que es el responsable de cinco incendios forestales en la provincia.

Las tormentas eléctricas, el aumento de las temperaturas, los incendios intencionados y la falta de conocimiento acaban costando muy caro a la fauna y la flora de nuestro país.