Un hombre estalla en Guipúzcoa por la actitud de su vecino y la queja se hace viral: "Quisiera conocerte"
Hace unas semanas, el perfil de Twitter recogía el mensaje que había dejado uno de los vecinos de un edificio en Vergara (Guipúzcoa)
Madrid - Publicado el - Actualizado
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La convivencia entre vecinos no siempre es buena. Hay muchos afortunados que tienen la suerte de mantener una buena relación con quienes viven al otro lado de la pared. Otros, no obstante, no son los compañeros de edificio que nos gustaría. El perfil de Twitter @LiosdeVecinos recoge algunas anécdotas de lo más curiosas entre vecinos que parecen hasta ficción. Pero no es así.
Hace unas semanas, el perfil de Twitter recogía el mensaje que había dejado uno de los vecinos de un edificio en Vergara (Guipúzcoa): "Al hartazgo de barrer la ceniza que echas, ayer se sumó el de recoger una colilla encendida de la repisa de mi ventana, y no es la primera. Quisiera conocerte e inmortalizar el momento con una foto contigo, la colilla y el Ertzaintza que esté de guardia", escribió el vecino del primero. Finalmente, concluye: "Ánimo campeón/a, muéstrate".
La misma cuenta de Twitter, subía el pasado domingo el siguiente tuit: "Mientras tanto en Fontiñas (Santiago)". Junto a estas palabras, podía verse en la fotografía adjuntada un papel escrito a ordenador junto a algunas respuestas escritas a mano. Atento a todo lo que sucede.
Un vecino visiblemente molesto escribe: "A los del 4º que ayer jueves celebraron una velada musical hasta las 2 de la madrugada. Adele canta fenomenal". A esta primera ironía, responde el hombre que supuestamente había montado esa jornada de música. "Tenemos buen gusto los dos".
"Es estupendo que cultivéis vuestras aptitudes musicales (el "pum, pum, pum" ya lo tenéis controlado", continúa quejándose el vecino a través de este escrito, a lo que el aludido responde. "Aún no está del todo controlado".
Inmediatamente después, pide que por favor no hagan ese tipo de veladas a esas horas. "Cuando me deja el trabajo, lo siento", se excusa el vecino. La queja se enmarca en que "algunos trabajamos y madrugamos. Tenemos, además, el derecho de descansar". La conversación escrita va incrementando la tensión por momentos. "Trabajamos todos, también tengo el derecho a no leer o encontrarme esta nota".
El vecino incómodo con lo ocurrido continuaba con su argumento del por qué no deben hacerse este tipo de cosas a esas horas. "Hay locales en los que podéis dar rienda suelta a vuestras inquietudes musicales, sin molestar a nadie". Es ahí cuando el aludido responde. "Hazme un bizum y listo".
Por último, concluye pidiendo que se respete a los demás vecinos del bloque a lo que la persona que recibe estas quejas sentencia. "Habla por ti, es lo que tiene vivir en un piso. Hoy yo mañana tú. PD: Me quedan dos clases más".