Los jóvenes enganchados al móvil son más infelices

Los jóvenes que están permanentemente enganchados al móvil son más infelices. Así se desprende de un estudio realizado por la Universidad Estatal de San Diego y que publica la revista especializada Emotion. 

Su autor principal, Jean Twenge, se pregunta: “¿Por qué los niños superconectados de hoy están creciendo menos rebeldes, más tolerantes, menos felices completamente desarmados para la fase adulta?”.

Para llegar a esta conclusión el equipo del profesor realizó una encuesta a más de un millón de jóvenes estdounidenses de entre 15 y 18 años. Estos datos ponen de manifiesto que los adeolescentes que pasaban más tiempo frente a los dispositivos de pantalla eran “notablemente” más infelices que aquellos que invirtieron más tiempo en actividades como deportes, lectura y el tan denostado “cara a cara” con sus semejantes.

Esto no quiere decir que no usen las nuevas tecnologías, porque el mismo estudio revela que los más felices usaban soportes digitales un poco menos de una hora por día. Según TwEnge “la clave de los soportes digitales y la felicidad es el uso limitado”.

El problema está en el aislamiento que produce estar permanentemente conectado. El psicoterapueta Angel Peralbo aseguraba en el programa de COPE "Hablar en familia" que los chavales dufren cada vez más problemas de depresión porque emocionalmente no estamos educándolos para ello. Cuando hay depresión lo que suele ocurrir es que “disminuyen las actividades clásicas aumenta el aislamiento, la pasividad les lleva a jugar para no hacer actividades que tengan que poner motivación o interés”.

CONSEJOS PARA QUE LOS JOVENES NO SE ENGANCHEN AL MOVIL

Para evitar que este aislamiento ocurra y acaba formando adultos infelices y depresivos Peralbo propone: “Una de las claves es empoderarles darle capacidad de decidir, darles acompañamiento de responsabilidad y establecer límites y consecuencias”.

Los autores de este estudio proponen: