¿Por qué cada vez nos gustan menos los videojuegos violentos?

Los videojuegos más demandados siguen siendo los de acción, pero su venta ha caído en nuestro país un 9% en los últimos 5 años, en favor de los juegos de rol, que copan 2 de cada 10 ventas y de los de deportes con tendencia al alza, según los datos de un estudio realizado por la escuela de diseño LCI Barcelona, sobre los datos de venta del sector. Todo un cambio de tendencia que tiene mucho tiene que ver también con el auge de los juegos de mesa.

El ranking actual está encabezado todavía por los juegos de acción con casi 1.800.000 unidades de las poco más de 7 millones vendidas. Los juegos de rol, que escalan hasta la segunda posición, rondan el millón y medio. Los de deporte siguen terceros con más de un millón y los de aventuras siguen siendo la cuarta opción, en su caso por debajo de las 750.000 unidades.

Juegos de mesa

Quién nos iba a decir hace cinco años que un precioso gatito al que tenemos que mover por un mundo distópico y lleno de peligros iba a triunfar por encima de cualquier videojuego en el que nos enfundamos una armadura cibernética cargada de gadgets ideados para matar al enemigo. Pues la paradoja es que, poco a poco, este gatito está ganando terreno al matón violento.

Los resultados del estudio han sorprendido a los investigadores, aunque de alguna manera, se lo esperaban, nos confiesa David Carretero, Jefe del Área de Animación y Videojuegos de la escuela de diseño y responsable de la investigación. “Hay un gran auge de los juegos de mesa mundialmente, y sobre todo en España-explica el investigador-y eso lógicamente está llevando a los juegos de rol de mesa. Y al final eso, se iba a llevar a la parte de video. Sorprendieron un poquito los datos, pero viendo la tendencia era previsible”.

Vivir aventuras

Carretero está convencido de que la tendencia irá creciendo “por la hermandad con los juegos de mesa. Esta parte de juegos ya no es tan separatista. Nos pasa incluso en la escuela. Los alumnos nos piden salas para jugar a juegos de mesa. Yo creo que el jugador ya no se queda anclado en un solo sector, busca más ocio”. El chute de adrenalina sin más está dejando paso a esa otra forma de jugar donde se busca “vivir aventuras, es un poco como leer, leer comics.

Yo me quedaría-asegura el profesor- con que la gente tiene muchas ganas de vivir otras historias”.

¿Vamos por el buen camino?

Las advertencias de educadores y psicólogos sobre las consecuencias negativas que los videojuegos de acción pueden tener para niños y adolescentes parecen haber calado en la sociedad. Pero no todos los videojuegos tienen un asterisco para los más jóvenes.

La psicóloga Ana Altabás señala que hay muchos que “requieren habilidades cognitivas como la resolución de problemas, el pensamiento crítico, la toma de decisiones y la planificación estratégica. Estos juegos pueden ayudarles a pensar de manera analítica y crítica. Otros son educativos, los hay que enseñan matemáticas, ciencias, historia o idiomas de una manera divertida y efectiva. Otros pueden mejorar la resiliencia, pueden fomentar un entorno seguro para que practiquen la resistencia y la concentración, porque al enfrentarse a desafíos y obstáculos en le juego, aprenden a superar la adversidad, a manejar la frustración y na seguir intentándolo hasta lograr el éxito”.

¿Cuáles son los más adecuados?

Nos recomienda la psicóloga que busquemos para nuestros hijos videojuegos acordes con su edad, que puedan estimular a la vez el pensamiento crítico, la creatividad, el aprendizaje, que fomenten valores positivos, la empatía, la solidaridad, el trabajo en equipo… Pero además tenemos que asegurarnos de que en entorno sea seguro en línea. Con todo “témenos que supervisarlos, tanto para asegurarnos de que las interacciones que tiene con otros jugadores son seguras como para controlar el tiempo que dedican al videojuego. El mayor peligro es que se enganchen”.