Una experta explica en qué consiste la técnica 4-7-8 y por qué te permitirá dormir toda la noche
Según la psicóloga desarrollar estos ejercicios de respiración contribuyen a relajar el cuerpo (lo que nos ayuda a poder dormir mejor) y a oxigenar los órganos (reduce la ansiedad)
Madrid - Publicado el - Actualizado
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La psicóloga Beatriz Gil Bóveda recomienda practicar la técnica de respiración 4-7-8. Una técnica que puede ayudarnos a afrontar situaciones de estrés o ansiedad, que se pueden desencadenar como motivo de la vuelta a la rutina después de los meses de vacaciones. Además, esta técnica no solo ayuda a combatir el estrés, sino que además influye de forma positiva ayudándonos a conciliar el sueño.
Para desarrollar esta técnica, en primer lugar, la persona debe situar la punta de la lengua en el paladar, detrás de los dientes. Y a continuación desarrollar las siguientes fases:
1. Abrir la boca y exhalar todo el aire por la boca.
2. Cerrar los labios y respirar a través de la nariz contando hasta cuatro segundos.
3. Aguantar la respiración durante siete segundos antes de soltar el aire.
4.Soltar el aire abriendo la boca y manteniendo el tiempo de exhalación durante ocho segundos.
Se recomienda que el desarrollo de estos pasos se realice en una posición cómoda o tumbados, ya que por lo general se lleva a cabo una oxigenación que produce mareos. Además, en las primeras veces se recomienda no realizarlo más de cuatro veces. Y según la persona se familiarice con esta práctica, se recomienda ir aumentando el número de veces que se repite la operación.
El nombre de la técnica deriva del número de segundos que se debe mantener el aire en cada paso. Además, según la psicóloga desarrollar estos ejercicios de respiración contribuyen a relajar el cuerpo (lo que nos ayuda a poder dormir mejor) y a oxigenar los órganos (lo que ayuda a reducir los niveles de ansiedad).
Además de este ejercicio existen otros métodos que pueden ayudarnos a combatir el estrés, como la realización de ejercicio físico desarrollar ejercicios calmados como yoga. De esta forma, mantenemos a nuestra mente entretenida con otras ocupaciones, pudiendo desconectar de la rutina o el estrés que esta nos genera.
¿Por qué tenemos estrés?
Todos hemos tenido estrés alguna vez en nuestras vidas, bien sea por una fecha importante, un cambio susceptible en nuestras vidas, en la escuela, en el trabajo, después de una mala noticia. ¿Qué nos sucede para que sintamos esos nervios que nos incomodan?
Aunque pueda parecer lo contrario, todo el mundo sufre de estrés. Sin embargo, lo que diferencia a unas personas de otras es la
. El mejor consejo para poder acabar con el estrés es encontrar la forma de sobreponerse a él de una forma u otra ya que
, tanto física como mental.
Varios de los motivos por los que tenemos estrés puden derivar de la rutina, ya sea por el alto nivel de trabajo, la escuela o la familia.
Otros, se derivan de un cambio brusco y repentino, normalmente negativo, como puede ser una enfermedad, la pérdida de un ser querido o una ruptura sentimental. El por qué del estrés también lo podemos encontrar en causas mayores o acontecimientos fuera de nuestro alcance como puede ser un desatre natural o una guerra.
A pesar de que la principal acepción del estrés está asociado a la negatividad, podemos llegar a adoptar el estrés como una motivación para actuar o estar mejor preparado para lo que viene como puede ser el afrontar un día duro de trabajo o un exámen importante. El cuerpo está listo para enfrentarse a las amenazas o encontrarse seguro ante las adversidades con el objetivo principal de sobrevivir y seguir adelante de la mejor manera posible.
El estrés continuado en el tiempo puede originar problemas de salud y para ello debemos encontrar la manera de eliminar los nervios o, en el caso de que no sea posible, reducirlos poco a poco. Hay varias formas de combatir el estrés e incluso prevenirlo.
La principal ayuda que podemos tener es reconocerlo para poder evitarlo posteriormente. Tener dificultad para dormir, enfados constantes o sensación de poseer poca energía son algunas de las consecuencias más comunes. A partir de aquí, realizar ejercicio de manera regular, probar alguna actividad relajante u organizarse de cara al trabajo, puede ser de gran ayuda además de las recomendaciones pertinentes de su médico.