Así se preparan las aficiones antes del Brasil – Argentina de la Copa de América

¿Quién es el mejor de la historia del fútbol: Pelé o Maradona? ¿O tal vez Messi? A horas del Brasil-Argentina de la Copa América, los brasileños esgrimieron a 'O Rei', y los argentinos defendieron al 'Pelusa' y a Messi, en un duelo de cánticos en los alrededores del estadio Mineirao.

"Mucho ambiente y muy bueno, a pesar de ser catalogado un partido de alto riesgo. Hay un despliegue de 2.000 efectivos de seguridad", ha explicado Nacho García en 'El Partidazo de COPE', enviado especial de COPE a la Copa de Amércia.

La primera semifinal de la Copa América es, entre otras muchas cosas, un clásico del fútbol mundial. Y desde cuatro horas antes del inicio del encuentro, aficionados de la 'Canarinha' y de la 'Albiceleste' hicieron honor a la entidad del partido, dando un magnífico ambiente al entorno del estadio.

Por fin el majestuoso estadio de Belo Horizonte, sede de cuatro partidos de grupo en esta Copa América, disfrutó de un ambiente acorde al torneo de selecciones más antiguo del mundo. La mística de un partido grande, inmenso, y el buen humor de dos aficiones dispuestas a disfrutar.

Aficiones que parecían empatadas en cuanto a efectivos en los alrededores, incluso con cierta mayoría argentina por la potencia de sus cantos y la pasión de sus aficionados; pero las previsiones son de una inapelable mayoría de la 'verdeamarela'.

Se calcula que entre 4.000 y 6.000 argentinos acudirán esta noche al Mineirao, frente a más de 50.000 aficionados brasileños en el que podría ser el primer lleno de la Copa América.

"Brasilero, brasilero, qué amargado se te ve, Maradona es el más grande, es más grande que Pelé", "Brasil, decime que se siente, tener en casa a tu Papá" e incluso "Oh, se comieron siete", en referencia al 1-7 de Alemania a Brasil en el Mundial 2014, gritaban y saltaban los aficionados albicelestes.

"Oh argentino, cómo es, que Maradona chupa bola de Pelé" o "Mil goles, mil goles, solo Pelé, solo Pelé", contratacaban los brasileños.

"Brasil va a ganar fácil a Argentina 3-0, dos goles de Coutinho y uno de Firmino. Arthur va a ser el mejor y Casemiro va a anular a Messi", apostaba en conversación con EFE André, belorizontino, junto a sus amigos Gustavo y Natá.

Los brasileños no tienen miedo al síndrome del 'Mineirazo'. "El 2014 está olvidado, solo Brasil tiene cinco Mundiales, Argentina dos", agregó Gustavo.

Dos jóvenes 'albicelestes' llegados desde Buenos Aires específicamente para este encuentro, Leandro y Pablo, se mostraban cautos. "No sabemos cómo va a quedar, pero venimos con toda la fe, tenemos mucha confianza en el equipo y pase lo que pase vamos a seguir apoyando. A nosotros no nos gana nadie fácil".

¿Aparecerá Lionel Messi por fin en esta Copa América? "Lo esperamos, lo esperamos", añadió Pablo en charla con EFE.

La presencia de Messi y el gusto de los brasileños por los grandes jugadores genera también una situación curiosa: la de aficionados que animan al astro del eterno rival. Entre ellos Fabio, que llegó al Mineirao con una camiseta a dos mitades: amarilla en la derecha, albiceleste en la izquierda.

"Soy brasileño, pero sigo a Messi de corazón. Hoy quiero que gane 1-0, gol de falta. El resto de partidos con Brasil. Messi es el mejor jugador de todos los tiempos", aseguró este aficionado.

Otro caso similar, un aficionado brasileño que directamente se presentaba con la camiseta albiceleste: "Soy brasileño, belorizontino y maradonista. Vine aquí para animar a Messi y a la albiceleste", explicó.

Porque un Brasil-Argentina da para eso y mucho más. Incluso para que un grupo de novias, vestidas como tal para la ocasión, se presenten en los alrededores del Mineirao con el objetivo de conseguir ayuda para recolectar 36 trajes de hombre destinados a una boda comunitaria de personas con bajos recursos.

Su belleza pasaba casi inadvertida en un panorama de colores, músicas, cánticos y fervor futbolístico a horas del superclásico del fútbol sudamericano y mundial. Un Brasil-Argentina que decidirá el primer finalista de la Copa América, el primer inquilino del gran partido del Maracaná.