Las elecciones de EEUU vistas por Vanesa Navarro, la onubense que ejerce como única observadora internacional española

Vanessa Navarro, una onubense originaria de Nerva y la única española invitada a ejercer de observadora internacional en las elecciones de Estados Unidos, comparte su visión y expectativas sobre esta oportunidad. La invitación le llegó a través de la Academia de Comunicación Política de Washington, tras reconocer su trabajo en Huelva con dos premios de comunicación política, considerados los 'Oscars de la comunicación', por la calidad de su estrategia y formato digital. Su agencia, Malacate Comunicación, toma su nombre de un elemento minero en homenaje a sus abuelos y a la cuenca minera de Nerva, su lugar de origen.

En la entrevista, Navarro explicó que la figura del observador internacional en estas elecciones difiere de la que se ve en otros contextos, como en Venezuela, donde se realiza una supervisión de transparencia electoral. En este caso, su papel es exclusivamente académico, destinado a analizar los fenómenos comunicativos y el comportamiento social en torno al final de la campaña, el día de los comicios y el período post-electoral. A pesar de la credencial otorgada por el gobierno de Washington, Navarro aclaró que su misión no incluye la certificación de resultados.

En cuanto a las elecciones, Navarro destacó que estos comicios son de gran relevancia política, con unos sondeos que auguran una de las campañas más reñidas en la historia de Estados Unidos. Explicó que en esta recta final, la diferencia de puntos entre los candidatos en varios estados oscilantes es muy pequeña, y puso énfasis en que la clave de esta contienda no radica solo en las estrategias de marketing, sino en la eficacia de los mensajes y la capacidad de movilizar a los votantes a través de las emociones.

Durante su visita, Navarro también planea observar cómo Donald Trump y sus asesores manejan temas centrales de la campaña, como la inmigración, la economía y la violencia armada, y cómo se abordan con estrategias diferenciadas entre los candidatos. Mencionó, por ejemplo, que Trump ha sabido aprovechar la narrativa de la deportación masiva de migrantes y que ha utilizado su propia red social, Truth Social, para difundir mensajes, en un acto que Navarro considera preocupante por su impacto en la erosión de principios democráticos. A su vez, comentó que la extrema derecha española podría estar replicando este modelo, con canales de difusión que moldean opiniones en redes cerradas y controladas.

Otro tema crucial que Navarro destacó fue la polarización en torno al derecho al aborto, especialmente entre los votantes jóvenes y las mujeres, un segmento que ha mostrado un alto registro de votantes esta vez, lo que podría influir en el resultado final. Asimismo, abordó el uso de la inteligencia artificial en la campaña, destacando que se utiliza tanto para la recaudación de fondos como para desinformar a ciertos votantes mediante llamadas telefónicas automatizadas, algo que, en su opinión, representa un desafío ético importante en la comunicación política.

Finalmente, Navarro se mostró interesada en analizar la estructura y las estrategias de los mítines de cierre, especialmente el de Donald Trump. Aunque señaló que no es seguidora de sus políticas, considera que se trata de una oportunidad única para estudiar el fenómeno de Trump y cómo sus discursos logran conectar emocionalmente con sus seguidores. Subrayó que observa con interés la comunicación no verbal y el contexto cultural estadounidense, que tiende a hacer de la política un gran espectáculo.