Así se prepara un restaurante para acoger cenas de empresa de hasta 400 comensales

Ya es una tradición. Principios de diciembre y, aunque cada uno tiene sus opiniones sobre si acudir o no, las empresas fijan la fecha de una de las citas más significativas del año: la cena de Navidad. Cuando llega una convocatoria de este tipo es señal de que el año va tocando a su fin, pero, cada vez más empresas están concienciadas a celebrar un encuentro de este tipo, hasta el punto que es casi una misión imposible encontrar un lugar para celebrar, sobre todo, si el grupo es numeroso. 

Esto mismo le viene ocurriendo estas últimas semanas al restaurante Embarcadero, de Las Palmas de Gran Canaria. Allí, incluso, han llegado a cerrar completamente su local para una sola empresa. A más de 400 personas han llegado a atender simultáneamente. Ahí es nada. Rafa Bueno es quien está detrás de este restaurante. Nos comenta la fórmula mágica para que todo salga bien: “Es primordial elegir un menú. Y no cualquier menú. Siempre preparamos varias opciones para que los clientes puedan elegir. Ahí predisponemos a todo el equipo para crear un ambiente lo más agradable posible. En nuestro caso, además, contamos con un salón amplio para alojar la barra libre y la música”.

FECHAS MÁS CONCURRIDAS

A partir del puente de la Constitución, todo va a ser un colapso. Mejor reservar con antelación. El propio Rafa Bueno nos decía cuál son las fechas más demandadas por sus clientes: “El 13 y 14 de diciembre. Este año, viernes y sábado. Es complicado porque son muchas empresas que buscan lo mismo y hay que hilar muy fino para que toda la planificación salga bien”.

¿QUÉ PRODUCTOS SE CONSUMEN MÁS?

Los menús también es un aspecto clave a la hora de planificar unas semanas como estas en la despensa de un restaurante. La carne es un clásico. Pero, sin duda, en el Embarcadero, su seña de identidad es el pescado: “En los últimos años nos hemos especializado en pescados a la brasa. Pescados, ventrescas, cabezas, colas. Y, sobre todo, pescado local. Hablamos de especies como el medregal, chama, chernes, pámpano o atún. Aunque también tenemos cosas riquísimas de fuera como un buen rodaballo”.