Se pasa sus vacaciones en la playa en restaurantes y se queja de lo que le cobran por el pan: "Tres mendrugos"
Hay zonas en España donde se está notando que la gran afluencia turística afecta a los precios de la hostelería, como sucede repasando estos tickets de varios locales
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Millones de españoles han hecho las maletas para marcharse de vacaciones tras un largo año de trabajo, pero este año han tenido que rascarse el bolsillo para disfrutar de unos días que se antojan prohibitivos. Para muestra, el lamento de este joven tras unas vacaciones en las Islas Canarias por el precio que le ponen al pan.
Este verano será uno de los más caros de la historia. Los portales especializados en comparar precios apuntan a que van a subir en torno a un 10% respecto a 2021, cuando España empezaba a recuperarse tras la pandemia. En total, de media, siete días en primera línea de playa costarán más de 1.300 euros.
Si entramos al detalle, se observa cómo el precio de los paquetes turísticos nacionales se ha disparado un 17,7% frente al año pasado. El de hoteles, hostales, pensiones y similares crece un 9,4%, mientras que el de los alquileres turísticos es un 6,6% más elevado que a estas alturas de 2023.
Los establecimientos de comida rápida y para llevar son un 5,3% más caros, y los restaurantes, cafés y similares han subido sus precios un 4,8% frente al año pasado. El desplazamiento también será más costoso: el precio de las gasolinas en mayo se situaba un 4,8% por encima de 2023.
El pan
En los últimos años, una práctica común en los restaurantes españoles ha generado controversia: el cobro del pan. Esta costumbre, integral para muchos, ha suscitado debates sobre su legalidad y ética. También plantea interrogantes sobre las prácticas comerciales en el sector hostelero.
Cobrar el pan en un restaurante puede llevar a conflictos, pero está permitido siempre y cuando se cumpla con la normativa. Los profesionales de la hostelería deben informar a los clientes de que la ración tiene un coste antes de servirla. Además, debería de estar especificado en la carta.
En el caso de que el comensal no quiera consumirlo, deberá indicarlo al camarero inmediatamente según deje el pan en la mesa, de lo contrario el establecimiento podrá cobrarlo. De esta manera, tan sencilla, evitarás malentendidos y posibles situaciones tensas a la hora del pago.
En otros países europeos, las prácticas varían. En Italia, por ejemplo, es común encontrar un cargo por "coperto" que incluye pan, aceite y, a veces, otros aperitivos. Francia, por su parte, suele incluir el pan como parte del servicio sin cargo adicional. Estados Unidos presenta un panorama más variable en función del local.
Se queja de lo que le cobran
Pero aquí no hubo dudas. Fue el propio cliente el que lo pidió, pero eso no le impide opinar por los precios que se ha encontrado durante sus vacaciones. En el vídeo muestra a través de varios tickets de los restaurantes en los que estuvo como los precios por este alimento tradicional en las mesas españolas han llegado a un punto descontrolado.
El joven lamenta que, por "tres mendrugos" que le ponen, tenga que pagar una cantidad tan alta. Teniendo en cuenta el propio precio del pan en una panadería, resulta llamativo. Pero estas situaciones son recurrentes en zonas en las que hay mucho turismo extranjero, como en la isla de Tenerife.