Buruaga, en su primer mensaje de Navidad: “Tengo una inmensa fe en Cantabria"

La presidenta de Cantabria, María José Sáenz de Buruaga, ha mostrado su confianza en las capacidades de la comunidad autónoma para estar “a la cabeza” del progreso y del bienestar en España, para crear empleo y riqueza, y para convertirse en la “tierra de las oportunidades que merece ser”.

“Tengo una inmensa fe en Cantabria, la mejor región del mundo. Lo tenemos todo para poder ser y hacer lo que queramos, para ser la vanguardia de soluciones valientes y hacer de Cantabria una tierra líder”, ha dicho Buruaga en su primer mensaje de Navidad a los cántabros.

La presidenta ha recordado que este año 2023, que ahora finaliza, ha supuesto el inicio de una “etapa de cambio” en la comunidad a partir de las elecciones autonómicas del pasado mes de mayo y la llegada del nuevo Gobierno, cambio que pasa por “reconstruir” la sanidad pública, reducir las “insoportables listas de espera” y avanzar hacia una educación de excelencia y un sistema puntero en investigación e innovación.

También por fortalecer el trabajo de los ganaderos y las gentes de la mar, hacer efectiva la igualdad de oportunidades en el medio rural, prestar una mejor atención a los mayores y a las personas dependientes, apoyar a las familias y procurar las condiciones para que los jóvenes no tengan que marcharse fuera en busca de un futuro.

“Esa es la Cantabria pujante, fuerte y próspera que queremos y hemos empezado a construir”, ha señalado Buruaga.

A su juicio, el mejor instrumento para empezar a materializar ese proyecto de cambio es el presupuesto para 2024 que se acaba de aprobar esta misma semana en el Parlamento, unas cuentas que, según ha destacado, van a vehicular la “agenda de reformas” del Gobierno y a propiciar “el vuelco” que necesita la región.

¿Cómo? Con la bajada de impuestos más ambiciosa de la historia de la autonomía, con una inversión pública nunca antes vista en Cantabria, con menos cargas burocráticas, con la vuelta al régimen de construcción de viviendas unifamiliares en suelo rústico, con el impulso a la vivienda social o con la puesta en marcha de obras de infraestructuras por todo el territorio regional, entre otras medidas.