Detenidos tres ganaderos del Valle del Miera por introducir la enfermedad hemorrágica en Cantabria
El verano pasado se declaró el brote de esta enfermedad en la región donde murieron más de 1000 vacas, generando un perjuicio de unos tres millones de euros
Santander - Publicado el - Actualizado
2 min lectura
La Guardia Civil de Cantabria en el marco de la “Operación Rumia” ha detenido a tres hombres, vecinos de Cantabria, como presuntos autores de pertenencia a grupo criminal y delito de daños. A dos de ellos, además, se les considera presuntos responsables de delitos contra la salud pública y falsedad documental.
El epicentro de dicha enfermedad en Cantabria estaría en una explotación ganadera de la zona del Valle de Miera. Del estudio de los datos epidemiológicos de esta enfermedad y su posterior transmisión, se ha determinado que fue traspasándose por el norte peninsular, desde Cantabria, llegando a sobrepasar la frontera con Francia.
En enero de 2023, estos hombres, trasladaron un importante número de vacas a dos zonas de pastos en Cáceres, volviendo en el mes de julio, una vez que se había declarado la citada enfermedad, unas 200 vacas, sin contar con las preceptivas documentaciones para el movimiento de este ganado y las comunicaciones de entrada en Cantabria.
En los pastos de Cáceres, una vez comenzada la investigación, se localizaron restos cadavéricos de ganado vacuno.
El SEPRONA (Servicio de Protección de la Naturaleza) de la Guardia Civil comenzó la investigación al declararse esta enfermedad animal en Cantabria, tras comprobar que se había roto el patrón de propagación. En concreto, se observó un salto de la enfermedad superior a 350 kilómetros, circunstancia que no era acorde con la forma de propagación.
Durante la investigación se vio que el vector de propagación era coincidente en la enfermedad hemorrágica y la lengua azul. Además, en las mismas fechas, se comprobó la existencia de ganado medicado en la citada explotación, consiguiendo informaciones que apuntaban a una alta incidencia, en fase de viremia por la enfermedad hemorrágica y la lengua azul, en la mencionada estabulación.
La semana pasada se procedió a la detención de dos responsables de la explotación ganadera y del transportista que había realizado los movimientos ilegales del ganado a Cantabria.
Se calcula que el perjuicio económico generado en Cantabria supera los 3 millones de euros, correspondiendo a las indemnizaciones por muerte y tratamientos del ganado, así como, los derivados de la vacunación a la cabaña ganadera por la lengua azul.