Un documento con 487 años ha sido restaurado en un pueblo de Cuenca y tiene como firma al emperador Carlos V
Restaurado el pergamino de concesión del título de Villa a Albendea que está datado en 1537 y está firmado por el emperador Carlos V
Cuenca - Publicado el - Actualizado
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Cuenta la historia que en el año 1537, hace ya 487 años, el emperador Carlos V firmó un pergamino que concedía el título de villa al pequeño municipio conquense de Albendea, de 132 habitantes.
En aquel momento, este documento permitía a la localidad tener jurisdicción propia independiente de la ciudad de Huete que era, donde se impartía la justicia en ese momento. Tras muchos años, este documento ha sido restaurado y con él se ha recuperado una parte de la historia de Albendea.
QUÉ APARECE EN EL DOCUMENTO
Para conocer cuando encuentran este pergamino, y cómo lo han restaurado, hemos hablado con su alcalde, Luis Enrique Pérez. Nos contaba que "aún teniendo oídas y conocimientos de que existía este manuscrito, un día casualmente, estando trabajando aparecía documentación atada en pequeños fardos en un cajón hecho un desastre. Y apareció lo que era el pergamino en un sobre y nos dimos cuenta del valor que tenía". Se pusieron en contacto a través de Cultura, para que vieran el pergamino y decidieron hacer una restauración.
Durante siglos este documento se ha conservado en el municipio, en un sobre, que han pasado de mano en mano, de lugar en lugar. Su alcalde nos comentaba que estaba tapado con plásticos "se mojaron algunos documentos, éste se pudo recuperar y pudimos ponerlo a buen recaudo en nuevo archivo". Este archivo pone en valor el municipio de Albendea desde tiempos anteriores, y sobre todo "este que data del año 1537, que ya vamos caminando a su quinto centenario, y para nosotros va a ser una fecha muy importante".
TRADUCIDO AL CASTELLANO
El documento encontrado está en castellano antiguo, y para hacerlo más accesible, se ha llevado a cabo un librito. Gente altruista y colaboradora ha querido hacer un cuaderno libro, "por un lado está la parte antigua que viene fotografiada y por otro lado, el manuscrito que habla de la época, los justificantes, cómo se reestructura el pueblo. Tiene un valor ya no económico sino cultural, de patrimonio".