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Viaje a 'El País de la Plata': un "revulsivo" económico y turístico para la Sierra Norte
Este Plan de Sostenibilidad Turística en Destino contempla la rehabilitación y musealización de la mina Santa Catalina de Hiendelaencina, con una inversión de casi 2,3 millones de euros
Guadalajara - Publicado el
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'El País de la Plata' es el nombre con el que se ha bautizado a uno de los Planes de Sostenibilidad Turística en Destino de la provincia de Guadalajara.
Dotado con un presupuesto de casi 2,3 millones de euros, financiados entre la Diputación Provincial de Guadalajara, el Gobierno de Castilla-La Mancha y el Gobierno de España, consiste en la "rehabilitación y musealización de la mina Santa Catalina", ubicada en el subsuelo de Hiendelaencina.
Así lo señalado en Herrera en COPE en Guadalajara, la teniente de alcalde del municipio, Isabelle Bancheraud, explicando que el proyecto va más allá de "hacer visitable una mina y que la gente pueda tener la experiencia de ser un minero por un día y conocer las entrañas de la tierra de la minería de la plata", sino que también contempla "la musealización del territorio de Hiendelaencina", sumándose así a los recursos que ya funcionan en torno a ese patrimonio minero, tales como "el Centro de Interpretación El País de la Plata y las rutas verdes para conocer in situ las instalaciones tanto mineras como hidroeléctricas de la misma época".
En definitiva, es un "conjunto" para "dar a conocer y conservar este País de la Plata", tal como lo llamó en su momento "Bibiano Contreras, que tiene un escrito que es el testimonio que tenemos de esa época", ha recordado Bancheraud.
De entre los "200 pozos" que se calculan de esa época minera en Hiendelaencina, destacan, al sur del territorio, "dos minas singulares, La Fuerza y La Malanoche", que tienen una nave circular "porque allí trabajaban con animales que daban vueltas para mover las poleas y para que los mineros y minerales pudieran bajar y subir"; la Santa Teresa, "que fue un pozo de extracción, pero también una fábrica de beneficio, donde se trabajaba para sacar la plata de lo que no lo era" y la más cercana al municipio, la mina Santa Catalina, que es la que va a ser rehabilitada.
Un proyecto de rehabilitación que, según la edil, "está en fase de licitación hasta el 27 de enero" e incluye dos espacios, por un lado, "la zona del castillete, con los edificios donde está la maquinaria que movía los cables y las jaulas para bajar a la mina" y, por otro, la creación, desde ese punto, de "una galería de unos 250 metros de longitud, que va a bajar por el subsuelo de manera suave, para que la gente pueda ir andando".
Además, dentro de ese itinerario, "habrá salas donde se va a contar todo sobre las minas, desde su explotación hasta la vida de los mineros y todo lo que fue la minería de Hiendelaencina".
Y es que la extracción de la plata de las entrañas de esa tierra serrana constituyó una industria de referencia a nivel europeo desde que las minas fueron descubiertas y comenzadas a explotar a mediados del siglo XIX.
"Se sacaron muchas toneladas de plata, de muy buena calidad, de mucha ley", ha asegurado Bancheraud, apuntando como dos muestras de la relevancia del antiguo esplendor de su municipio el hecho de que el metal precioso de Hiendelaencina "se llevaba a la Casa de la Moneda, de hecho, muchas monedas de la época de Isabel II se acuñaron con esta plata" y de que "el segundo mapa geológico de España es el de Hiendelaencina", debido al "interés económico por parte de los inversores para saber por dónde podían ir para encontrar esa plata".
De algún modo, el Plan de Sostenibilidad Turística en Destino 'El País de la Plata' pondrá en valor la actividad febril que se desarrolló en torno a "las minas más importantes de España en el siglo XIX" y que provocaron "una transformación brutal en su entorno y en la vida de Hiendelaencina a nivel social, económico y urbanístico", hasta el punto de que pasó de ser un pueblo basado en la agricultura y en la ganadería de subsistencia, con 200 habitantes, a ser un centro industrial con cerca de 5.000 vecinos, según el censo de 1857.
Pero, sin duda, el objetivo final de este proyecto es servir de "revulsivo económico" y de "oferta turística complementaria" para toda la Sierra Norte -ha concluido Isabelle Bancheraud.