Siete años después de la caída de San Juan de Ávila en Talavera se pone en marcha el nuevo templo

En la madrugada del 10 de octubre del año 2016, se derrumbaba la cubierta del templo parroquial de San Juan de Ávila, en Talavera de la Reina, sin causar daños personales, pero dejando la iglesia, el estado de ruina, lo que obliga a su total demolición. Tras varios estudios técnicos y con el objetivo fundamental de atender a las necesidades pastorales de la comunidad parroquial, se ha proyectado la construcción de un nuevo templo, así como de unos salones parroquiales donde atender a las diversas actividades y realidades de la comunidad parroquial.

Se ha presentado un templo con capacidad para cerca de 400 fieles, una capilla para la adoración al santísimo, otra bautismal, varias laterales y un columbario en una cripta subterránea bajo el presbiterio.

Por su parte, el centro parroquial contará con un salón de actos y 10 salas para catequesis dispuestas alrededor de un patio central dedicada a la santísima virgen María, así como dos despachos, un archivo, una sala de espera y dos aseos. La ejecución de este proyecto asciende a 2,27 millones de euros.

Esta nueva construcción será una respuesta a las necesidades de los feligreses y también una demostración de la valentía de los presentes en la archidiócesis, una iglesia particular, que sirve para ir a testimonio de fe, sin miedo, comprometida con la sociedad, buscando la construcción del reino de Dios en la tierra, como misión de todo cristiano.

Escucha el audio de Anastasio Gómez Hidalgo, ecónomo de la diócesis de Toledo