Zamora se rebela contra el cierre “de facto” de 20 de sus 24 cuarteles de la Guardia Civil

Es una de las polémicas de este verano por todo lo que puede arrastrar. Hace semanas, la Diputación Provincial de Zamora desvelaba los planes del Gobierno de España, de cerrar “de facto” los cuarteles de la Guardia Civil en varios puntos de la provincia.

Se defendía el subdelegado del Gobierno asegurando que no era un cierre, sino que los agentes que hasta ahora estaban en las oficinas de estos cuarteles atendían a muy pocos ciudadanos y que se iban a dedicar a patrullar las comarcas, abriendo de forma muy puntual estos cuarteles. Un nuevo funcionamiento que se desarrollará en 20 de 24 cuarteles, salvo en Zamora, Benavente, Toro y Puebla de Sanabria, que mantendrán su horario.

Para muchos, esta estrategia es el paso previo al cierre definitivo de los cuarteles de la Guardia Civil, lo que significaría un servicio menos en nuestro ya de por sí deprimido mundo rural. Tuvo que recular posteriormente el subdelegado del Gobierno asegurando que solamente era un programa piloto y que se valoraría su eficacia, pero hay quien defiende que tras esta decisión lo que subyace realmente es un problema de falta de personal.

Los alcaldes de la provincia no se han quedado parados y, con la Diputación como canalizadora, este viernes se han presentado las firmas de 209 ayuntamientos (de los 247 existentes), más 9 firmas de entidades menores (de 14), y las 16 Mancomunidades existentes para pedir al Gobierno que reconsidere esta decisión de cerrar “de facto” los cuarteles.

“Le ruego al subdelegado del Gobierno que escuche a los alcaldes de la provincia, que son los representantes de los ciudadanos y actúe en consecuencia, porque este tipo de errores con el tiempo se pagan y esta decisión es un cierre de facto de estos cuarteles”, exponía el presidente de la Diputación Javier Faúndez antes de realizar la entrega de firmas en la Subdelegación del Gobierno.