El error que cometes al ducharte y que puede perjudicar a tu salud: avalado por Harvard

Los defensores del "no bathing" consideran que es un derroche de agua y que la piel tampoco se beneficia de tanta higiene. El tópico español es que nos duchamos poco pero no es así

00:00

El error que cometes al ducharte y que puede perjudicar a tu salud: avalado por Harvard

Redacción COPE Cataluña

Barcelona - Publicado el - Actualizado

7 min lectura

Muchas personas dan por sentado que deben tomar una ducha diaria. La tendencia del "no bathing" cuestiona este dogma con argumentos basados en la salud y la sostenibilidad.

Es cierto que el agua es un bien escaso y también la energía es un bien muy caro, dos elementos básicos a la hora de llevar a cabo y disfrutar de ese pequeño placer que es ducharse.

Resulta obvio que la ducha diaria es “un lujo” o mejor dicho “un pequeño placer” de las sociedades con acceso a recursos y que la mayoría de la humanidad no se lo puede permitir.

Los defensores del "no bathing" consideran que es un derroche de agua y que la piel tampoco se beneficia de tanta higiene, (pero sí lo hace la pituitaria amarilla responsable de 'procesar el olor en nuestro cerebro).

El no bathing es una moda de no ducharse anglosajona

El "no bathing" es una moda de no ducharse anglosajona

¿Cada cuanto hay que ducharse según el informe de Harvard?

A decir verdad, a lo largo de ese estudio no se precisa cuál es la frecuencia de ducha aconsejable, ya que depende de factores individuales y del día a día de cada persona.

En España existe la fama de que nos duchamos poco. Que somos poco amigos del agua higienizante, pero los datos dicen lo contrario. Los españoles nos duchamos una media de 6 veces por semana. Ahí están los que se duchan varias veces al día y los que solo se duchan un par de veces

Sin embargo, el análisis tampoco pretende fomentar el descuido de la higiene corporal, puesto que también enumera los efectos negativos de no lavarse en el cuerpo humano, entre los que destacan la acumulación de suciedad, grasa, sequedad y picazón.

Tampoco hay que olvidarse, claro está, del olfato y el mal olor que desprende el organismo si no nos duchamos en varios días. Lo que sí concretan es que es aconsejable llevar a cabo duchas de corta duración, de unos tres máximo cinco minutos, y con agua tibia en vez de muy caliente.

Por otro lado, la ducha también es una cuestión estética, además que de salud. La higiene socializa, pues no hay nada que nos produzca más una persona poco aseada o con hábitos poco higiénicos.

Es una cuestión cultural. Para convivir hay que respetar unas normas, entre ellas la de higiene, otro asunto es como compatibilizar el uso racional del agua y de la energía.

Cada piel transpira de una forma distinta y huele, por eso el no ducharse provoca olores poco agradables. Pues a la no ducha hay que añadir que tampoco se realiza el cambio de ropa y ello contribuye a un ambiente personal de olor poco agradable.

"No bathing" o ahorrar energía

Los que se duchan menos o casi nada ahorran energía y agua. Eso es comprensible. Cada minuto de ducha representa unos 20 litros de agua que se van por el desagüe. En 10 minutos pueden ser nada menos que 200 litros; y 1.400 litros en una semana y 5.600 litros al mes.

Son cifras que podrían hacernos reflexionar. Además, una ducha consume casi cuatro kWh de energía. Con solo un kWh se puede lavar una carga de ropa o preparar 70 tazas de café.

Por lo tanto, el "no bathing" podría tener un impacto considerable en el ahorro de recursos, energía y dinero.

Los españoles nos duchamos mucho

Lejos de los tópicos y la fama, los españoles nos duchamos mucho

¿No ducharse es mejor para tu piel?

La ducha diaria va acompañada de la suposición de que es buena para la piel y para la salud. Pero, ¿alguien se ha preocupado por la microbiota de la piel?

La dermis está habitada por diferentes especies de bacterias que deben vivir en equilibrio para prevenir infecciones y problemas de la piel. Esta microbiota tiene que recuperarse después del estrés que representa cada ducha.

Además, la ducha, no solo elimina restos de sudor y suciedad, sino que también arrastra parte de la grasa que forma parte de las capas superficiales de la piel, sobre todo si se utilizan geles con detergentes. Como consecuencia, la piel pierde capacidad para retener la humedad y se reseca hasta el punto de que puede provocar una picazón desagradable y una sensación de tirantez.

También se hace más vulnerable a las infecciones.

¿Cuántas duchas son suficientes?

¿Significa eso que debes lavarte lo menos posible a partir de ahora? No necesariamente. No ducharse en absoluto puede ser tan malo para la piel como una higiene excesiva.

La suciedad física y las células muertas de la piel no deben acumularse, sino que deben eliminarse con un lavado regular. La frecuencia con la que debes ducharte depende de la condición de tu piel y de tu estilo de vida.

El no bathing propone que de una a tres duchas semanales suele ser suficiente para las siguientes personas:

- Niños.

-Personas con piel sensible.

-Personas propensas a la piel seca y al eczema.

-Personas que pasan la mayor parte de su tiempo en interiores y no hacen mucho ejercicio.

¿Ducharse o bañarse?

El dermatólogo Del campo señala que bañarse a diario (además de suponer un gran gasto de agua y un importante perjuicio medioambiental) puede acabar desequilibrando la capa hidrolipídica, por lo que la piel estará más debilitada frente a las agresiones externas (contaminación, radiación solar, virus y bacterias, etc.).

Además se puede volver más seca al perder parte de la grasa que la piel necesita para mantenerse sana.

En cambio, lavarse con más frecuencia (5 a 7 duchas semanales, por ejemplo) tiene sentido para estas personas:

-Niños pequeños desde la edad de gatear.

-Personas que sudan abundantemente debido a las condiciones climáticas y/o la actividad física.

-Personas cuyo trabajo ensucia.

No bathing: Consejos y sugerencias

Si deseas intentar el "no bathing", puedes tener en cuenta los siguientes consejos como guía:

Como regla general, si ves suciedad en tu piel o si has estado sudando profusamente, es una buena idea ducharse. De lo contrario, de una a tres duchas a la semana es completamente suficiente.

En los días sin ducha, puedes lavarte la cara, las axilas y la zona genital, por ejemplo, con las manos o en el bidet.

Nunca te duches con agua demasiado caliente, ya que reseca más la piel que el agua tibia.

Dúchate durante el menor tiempo posible, no más de cinco minutos.

Lavarse la cara en la ducha, no es necesario ni recomendable. El agua con la que te lavas el cuerpo es demasiado caliente para la piel sensible de tu rostro. El resultado puede ser enrojecimiento, irritación y envejecimiento prematuro de la piel, así que lávatela después de ducharte.

El gel de ducha o el jabón pueden ayudar a limpiar las axilas y los pies, pero no son esenciales para el resto del cuerpo. o Intenta evitar los ingredientes irritantes, como perfume, sulfatos, parabenos, ftalatos y polietilenglicoles (PEGs). Los geles con un certificado natural o ecológico están libres de estas sustancias.

Si te duchas más de 1 a 3 veces por semana, puede ser una buena idea aplicarte una crema hidratante natural después del lavado. o La ducha diaria no debe sobrepasar los 5 minutos (si es posible, mientras enjabonamos cabello y piel lo ideal es cerrar el grifo). “Para obtener todos los beneficios que nos ofrece la ducha podemos empezar con agua caliente, luego templada y acabar con agua fría". “La ducha no deja de ser para nuestra cultura un pequeño placer” además de un hábito de salud.

¿Qué pasa si no me ducho en una semana?

Mal olor: La acumulación de bacterias y piel muerta produciría hedor. Se acumularía una proteína que produce nuestra piel que tiene un olor desagradable, más el olor que produciría la mezcla de estas bacterias acumuladas con nuestro sudor, explica Cameron Rokhsar, dermatólogo en el Mt. Sinai Medical Center de Nueva York.

Infecciones: Llevar tal carga de bacterias sobre la piel puede ser muy peligroso si sufres algún tipo de herida o corte. Con la piel sucia, se multiplica el riesgo de sufrir una infección, explica Lauren Ploch, otra miembro de la American Academy of Dermatology.

Picor en la cabeza: Una capa de piel muerta se iría acumulando en la cabeza, provocando intenso picor. El pelo, además, se enmarañaría y se llenaría de nudos. • Acné: Al tener la piel cubierta de bacterias, los folículos pilosos corren riesgo de inflamarse, provocando acné y granos.

Problemas en la ingle: Es una zona muy sensible en la que pronto surgirían erupciones cutáneas y un fenómeno llamado intertrigo, que conlleva picor e incluso dolor.

Suciedad en los pies: El espacio entre los dedos de los pies se llenaría de hongos, que pueden amenazar la zona de la entrepierna. Se pueden transmitir al ponerte los pantalones o la ropa interior.

Temas relacionados

Programas

Último boletín

13:00H | 23 NOV 2024 | BOLETÍN