Madrid - Publicado el - Actualizado
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Quienes participan en el proyecto CASwaterLAB entre quienes se encuentra el Instituto de Tecnología Cerámica (ITC-AICE), celebraron a finales de febrero una reunión de seguimiento para presentar los progresos realizados en cada área de trabajo, compartir las principales conclusiones del “Taller Técnico” organizado el pasado mes de enero y asegurar el buen funcionamiento de la investigación, mediante la planificación de los próximos objetivos y distribución del trabajo.
El encuentro, que tuvo lugar en la Facultat d´Economia de la Universitat de València, congregó a representantes del IIAMA-UPV, ITC-AICE, Grupo Economía del Agua-UV y de la Cátedra FACSA-UJI, quienes debatieron sobre los detalles técnicos, estructura organizativa, necesidades de infraestructura y de gestión que debe configurar el LIVING LAB.
“El encuentro ha sido muy fructífero, ya que nos ha permitido avanzar en una serie de ámbitos y planificar la visita que realizaremos el próximo mes de abril al “European Center for Excellence for Sustainable Water Management”, en Países Bajos, para conocer in-situ un caso de éxito enormemente inspirador para ejemplificar esta acción”, aseveran los miembros del proyecto.
La investigación, que cuenta con financiación por la AVI (Agència Valenciana de la Innovació), se encuentra en una fase avanzada de su desarrollo y hasta el momento, los resultados obtenidos son positivos. De hecho, los próximos pasos se dirigen a determinar dónde se va a establecer el espacio y organizarlo, definir el marco de actuación y su pervivencia en el futuro.
Objetivos del proyecto CasWATERLAB
El objetivo final del proyecto CASwaterLAB es diseñar, crear, estructurar e implementar un “Living-Lab de agua” que ayude a mitigar el impacto del cambio climático en la provincia de Castellón y su afección en la reducción de recursos hídricos, mediante la reutilización de aguas residuales y la recuperación de recursos de valor.
Concretamente, para lograr este resultado final se trabaja en toda una serie de aspectos centrados en: identificar las barreras técnicas, económicas, legales y sociales existentes; determinar las tecnologías de interés y necesidades; implicar a la administración pública, crear una estructura organizativa y dotarla de roles y definir los servicios del WoLL para las empresas valencianas.
“No debemos olvidarnos que el objetivo final de la creación de este Living Lab es que sea de interés para todos los agentes y sectores, tanto del sector público, como del privado y del ámbito social. Suele ser difícil poner de acuerdo a usuarios finales, administración, empresas del sector competidoras, universidades y centros tecnológicos, pero podemos afirmar que lo estamos consiguiendo”, señalan los miembros del proyecto.
Finalmente, afirman que la creación del Living LAB busca diseñar una estructura que pueda ayudar a implementar tanto “el Plan DESEAR, como el Reglamento Europeo de Reutilización de Aguas, cumplir con la Directiva Marco del Agua, así como con los nuevos planes de cuencas y el Nuevo Plan de Economía Circular 2020”, concluyen desde CASwaterLAB.