¿Qué es ser normal? En Lugo buscan respuesta tan peliaguda cuestión

Qué es ser normal y, sobre todo, quién determina los parámetros de lo que se considera que entra dentro de la normalidad. Es la reflexión que les propone a sus alumnos el Instituto Lucus Augusti, decano de los centros públicos de secundaria en Galicia, en el sexto Reto Filosófico lanzado por este departamento para hacer reflexionar a los más jóvenes sobre asuntos que afectan, de un modo u otro, a su propia vida. 

El catedrático de Filosofía y responsable de este departamento en el Instituto Lucus Augusti, Juan Carlos Fernández Naveiro, explica que este Reto Filosófico es, en realidad, “un concurso de ensayo” para que los alumnos puedan, “con total libertad”, reflexionar sobre el tema propuesto.

El plazo de entrega de los trabajos es amplio, dado que se extiende hasta el mes de abril, como también lo es el punto de vista desde el cual pueden orientar sus reflexiones.

libertad creativa y originalidad

Los alumnos tienen absoluta "libertad creativa" y se valorará "la originalidad". “Lo pueden hacer desde la perspectiva que quieran”, precisa el profesor Fernández Naveiro, “sin límites de enfoque”, de modo que pueden responder a la ambigüedad de la pregunta desde “lo personal, lo social o incluso la política”.

El concepto de “normalidad”, aclara, es algo a lo que tiene que enfrentarse la gente, en general, y los adolescentes, de forma muy particular, “en su vida cotidiana”. De ahí la pregunta que se formula en este reto filosófico: “¿Qué es ser normal?".

Esa pregunta, recuerda Fernández Naveiro, da lugar a otras que, inexorablemente, van entrelazadas, como quién determina la necesidad “de ajustarse a la norma” o realmente “qué se espera de nosotros” para que entremos en los parámetros de lo que se califica como normalidad.

"polémica posible"

“Vemos en este tema una polémica posible, una posibilidad de debate”, dice este profesor, no solo en lo relativo a la reflexión sobre qué es ser normal en la sociedad actual, sino también en las consecuencias derivadas de determinadas sentencias.

Por ejemplo, opina puede promover la respuesta a otras preguntas como si es “bueno o no” adaptarse a ese supuesto concepto de normalidad o someterse al cumplimiento de “las expectativas” que otros depositan sobre nosotros.

También, añade, a las preguntas de si “hay que aceptarlo o no” o si es conveniente verlo “con cierta distancia”.

Los alumnos tienen ahora varios meses para pensar sobre todo ello y plasmar sus ideas en “pequeños ensayos” que pueden presentar hasta el mes de abril.