¿Cómo es vivir al lado de una obra en la que se trabaja día y noche?

Un vecino de Lugo, un hombre de 40 años fue detenido por la Policía Nacional, después de que amenazase con poner una bomba para volar la estación intermodal de la ciudad. En su casa no había explosivos. Simplemente, reconoció que estaba harto, desesperado, porque no podía dormir a causa de las obras que está ejecutando el Ministerio de Transportes para construir la futura terminal de ferrocarril y autobuses.

Esto sucedía hace algunas semanas. Realmente la actividad en la obra es realmente intensa. Basta con pasarse por el entorno de la Praza de Conde Fontao para comprobar cómo decenas de operarios, vestidos con ropa reflectante, se mueven como hormigas en torno a las vías, al tiempo que la maquinaria pesada hace su trabajo mientras vomita ruido y humo.

Una vecina del barrio, desde cuya casa se ven perfectamente las vías del tren y las obras que está ejecutando el Ministerio nos confirmaba que, efectivamente, se está trabajando “día y noche” para cumplir los plazos de ejecución de la futura estación intermodal de Lugo, ubicada en el mismo lugar que la antigua estación de ferrocarril.

"se trabaja día y noche"

Esta vecina del barrio de A Estación nos cuenta que tanto el ventanal del salón de su casa como su propio dormitorio “dan directamente a las vías del tren” y, por lo tanto, ahora también “a las obras”. Nos confirma que se “trabaja día y noche”. De hecho “siempre hay gente trabajando, incluso en esas noches de perros en las que hasta da un poco de pena ver a los operarios bajo la lluvia, pasando frío”.

“Creo que hasta en Navidad se trabajó a ese ritmo”, afirmó.

el ruido, cuestión de perspectiva

Por ello, le preguntamos si realmente el ruido que llega a los domicilios es tan molesto. Ella lo ve desde un punto de vista diferente al de otros vecinos. Reconoce que sí, que se escucha, especialmente por las noches, pero de sus propias palabras podemos inferir que cada cual tiene su propia perspectiva sobre lo que es o no soportable.

“Es algo necesario”, afirma, porque mejorar la calidad de los servicios públicos implica realizar obras que, en muchos casos son molestas. “Todo tiene un precio, es inevitable”, afirma, al tiempo que le resta importancia.

“Si un vecino se pone a reformar la cocina, sabes que vas a escuchar ruido hasta que acabe de hacer las obras”, añade, pero es lo que hay, viene a decir. Es algo temporal que se hace con la perspectiva de mejorar y de disfrutar, en este caso, de mejores conexiones ferroviarias y de una estación cómoda y moderna.

Las obras aún se prolongarán durante un tiempo. La previsión es que la parte ferroviaria de la intermodal esté terminada a finales de 2025 y la de buses, avanzado el año 2026.