Se publica una lista con las contraseñas más utilizadas del mundo: ¿Tengo que cambiar la mía?

En un mundo cada vez más orientado hacia el entorno digital, las contraseñas se han convertido en un aspecto imprescindible en nuestras vidas. Sirven para proteger nuestros datos y documentos tanto a nivel personal como profesional, pero mucho cuidado... para que cumplan su función tienen que ser contraseñas seguras. 

Y ese mensaje todavía no ha calado en nuestra sociedad, ya que la gran mayoría de los ciudadanos seguimos cometiendo errores y usando contraseñas muy débiles o inseguras. Todavía no estamos muy concienciados de la importancia de la seguridad de nuestras contraseñas, y eso es un problema muy a tener en cuenta... sobre todo sabiendo que más de la mitad de los ciberataques que se produjeron el año pasado en todo el mundo tuvieron su origen en el robo de credenciales. 

Hablamos de contraseñas porque esta misma semana se ha presentado el informe anual de NordPass, una de las compañía especializadas en ciberseguridad más conocidas del mundo que todos los años analiza los principales desafíos a mejorar en el sector tecnológico. Con él hemos descubierto que el panorama es desolador porque las contraseñas más usadas en España este año son lo más sencillo y lo más fácil que te puedas imaginar.

La más utilizada en España y en el mundo entero tanto a nivel personal como a nivel corporativo, es '123456', la segunda '123456789', la tercera '12345' y la cuarta 'España' con la E mayúscula. Más fácil imposible. Esto, unido al hábito de reutilizar contraseñas para distintas cuentas y plataformas, es un peligro y convierte en vulnerables a muchos usuarios. 

Y más todavía si tenemos en cuenta que los hackers tardan menos de un segundo en descifrar, por ejemplo, '123456' y solo tres minutos en el caso de 'España'. Jóvenes y mayores, todos tenemos que seguir aprendiendo en el uso de los medios digitales y para ello hay varios consejos. Estas son cinco pautas para mejorar nuestra seguridad, así que papel y boli:

- Primero, crear contraseñas robustas de al menos 20 caracteres que incluyan mayúsculas, minúsculas, números y símbolos.

- En segundo lugar, nunca reutilizar una contraseña para dos cosas diferentes.

- Después, es importante revisar nuestras contraseñas cada cierto tiempo para identificar las que son demasiado fáciles de averiguar.

- También se aconseja habilitar la autenticación en dos pasos para nuestras cuentas. Que no es otra cosa que poner nuestra contraseña en cuestión y después, en la siguiente pantalla, recibir un SMS con un código y escribirlo. Es como una doble barrera.

- Y por último, utilizar un gestor de contraseñas, una práctica que cada vez es más común.