Cristina L. Schlichting: “La de barbaridades que estamos perpetrando en nombre del nacionalismo”

Es 24 de marzo de 2018, operación salida, y se producen decenas de miles de desplazamientos por la Semana Santa. Mucha precaución al volante: te iremos conectando con la Dirección General de Tráfico para informarte del estado de las carreteras. Es además un fin de semana de mal tiempo, con vientos, lluvias y oleajes muy fuertes, de hasta nueve metros, en las costas cantábrica y atlántica pero también al oeste de las Baleares o el Mar de Alborán. Luego, Olcina nos dará los detalles meteorológicos de esta Semana Santa con dos temporales, el que ya ha empezado y el que comienza el jueves, con apenas un par de días de descanso en medio. Qué le vamos a hacer. Es tradición el mal tiempo en estas fechas.

El nombre del día es de un francés, Arnaud Beltrame, que ayer se ofreció a un asesino islamista como rehén, con el fin de liberar a la mujer que éste había escogido como escudo humano. Esta mañana ha fallecido a consecuencia de las heridas. Resulta conmovedor, en estos días de odio y enfrentamiento, que un señor joven, de 45 años, casado, elija sustituir a una pobre mujer y le salve la vida dando la suya a cambio. El episodio, ya los sabes, tuvo lugar ayer en el sudeste de Francia, muy cerca en realidad de España. Un marroquí de 25 años, un desgraciado, de nombre Reodvan Lakdim decidió lanzarse al crimen pidiendo la liberación del terrorista islámico Salah Abdeslam, autor de los atentados de 2015 en París. Robó un coche en la preciosa ciudad de Carcassonne, matando al pasajero, cuyo cuerpo fue encontrado después escondido en un arbusto, e hiriendo al conductor. Posteriormente disparó contra un grupo de policías que hacían ejercicio y resultaron heridos. Condujo después unos kilómetros hasta la pequeña ciudad de Trebes, donde entró en un supermercado gritando: ¡Soy un soldado del Daesh”. Allí mató a otras dos personas -un cliente y un empleado-. La gente aterrorizada se refugió en la cámara frigorífica, algunos pudieron escapar, pero el atacante cogió a una mujer como escudo humano. Fue en ese momento cuando el gendarme se ofreció voluntario para sustituirla y entró en el supermercado. Tuvo la precaución de dejar su móvil abierto en una mesa para que sus compañeros pudieran seguir la situación. Cuando oyeron disparos, un equipo especial entró en el supermercado. El terrorista fue abatido y Beltrame resultó gravemente herido. Finalmente ha fallecido. Una vida truncada, pero no inútil. Porque ha salvado otra y nos deja un profundo agradecimiento, la sensación de que la existencia no es sólo éxito, dinero, fama, sino la entrega por otro. El ministro del Interior francés, Gerard Collomb ha difundido esta mañana un mensaje por las redes sociales subrayando que “murió por su país y que Francia nunca olvidará su heroísmo, su valentía, su sacrificio”. Descanse en paz Arnaud Bertrand.

Y ya podíamos en España tomar hoy nota de lo verdaderamente importante, porque hay que ver la de barbaridades que estamos perpetrando en nombre del nacionalismo. Ayer se produjeron 24 heridos en Barcelona en las protestas contra el encarcelamiento de los líderes del procés.

Hoy sobre la 11:30h se celebrará el pleno de investidura de Jordi Turull como presidente catalán, que lógicamente no desarrollará ya que el candidato está en la cárcel desde este viernes. Parece que el presidente del parlamente, Roger Torrent, aprovechará para hacer un comunicado de defensa del procés catalán. El juez Pablo Llarena decretó en efecto el viernes la entrada en prisión de Jordi Turull y otros cuatro dirigentes del procés. Forcadell y Bassa,

han entrado en la prisión de mujeres de Alcalá Meco y Rull, Romeva y Turull en Estremera. Marta Rovira se escapó a Suiza. El magistrado anunció el procesamiento de 25 personas por distintos cargos como prevaricación, malversación de fondos o secesión y confirmó que 13 de ellas se enfrentarán a la gravísima acusación de rebelión, que entraña el uso de violencia y conlleva hasta 30 años de cárcel. Entre estos acusados se juzgará en ausencia a los fugados en Bruselas, Puigdemont y el resto de los consejeros y a los que se han trasladado a Escocia y Suiza. Ana Gabriel sólo está acusada de desobediencia.

Los periódicos traen hoy titulares llamativos, en particular los catalanes. ‘El Pais’ reza: juicio por rebelión y cárcel por atacar el estado de drecho. La Vanguardia, que afirma que el procés ha sido básicamente un movimiento pacífico señala: “El juez envía a la cárcel a otros cinco líderes independentistas” y El Periódico de Cataluña va a toda página: “Sin Piedad” .

El nudo del auto del juez Llarena lo constituye la minuciosa descripción de los hechos del 28 de septiembre, con el cerco a la consejería de Economía, que estaba siendo registrada por la Guardia Civil, y el referéndum ilegal del 1 de octubre. El magistrado considera acreditado que los procesados se pusieron de acuerdo para enfrentarse al estado y que se valieron de lo que llama literalmente “el poderío de la masa”. Al llamar a la gente a movilizarse, a través de Asamblea nacional catalana y

Omnium Cultural, la entidades lideradas por Jordi Sánchez y Jordi Cuixart, eran conscientes del riesgo de que se llegase a la violencia entre ciudadanos y fueron advertidos de ellos por los responsables policiales. En el ejercicio de sus responsabilidades como consejeros de la Generalitat los encausados generaron un escenario que dio lugar a la barbarie contra los coches de la guardia civil, el cerco de la consejería mientras los funcionarios intentaban hacer su trabajo o los enfrentamientos con la guardia civil en torno a las falsas urnas de votación. Visto lo visto, tenemos que agradecer que los males no fueran mayores.