Schlichting: "Los yihadistas prefieren el día santo de los musulmanes para perpetrar sus crímenes"
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¡Feliz Semana Santa! Es sábado 23 de marzo y mañana es Domingo de Ramos. Cientos de hermandades han comenzado a procesionar por toda España, en ese espectáculo tan nuestro, que no tiene igual en el mundo entero y que revela la pasión de un pueblo que, en pleno siglo XVI, decidió expresar en belleza y pedagogía en las calles que Dios se había hecho hombre, que había muerto asesinado para asumir lo más doloroso de nuestra naturaleza y que había resucitado para grabarnos en la frente que nunca, nunca, ni aunque pierdas un hijo, ni aunque tengas una enfermedad mortal, ni aunque te arruines o te abandonen, estás solo ni careces de una esperanza para siempre.
Atentado terrorista en Moscú: detenidos y más de 90 muertos
Es particularmente pertinente esta reflexión porque el horror, el daño provocado por nuestra maldad, se hizo ayer patente en Moscú.
Lo que oyes son unos terroristas disparando, uno a uno, contra visitantes inocentes de un centro comercial, el Crocus City, al que acudían para darse una vuelta y asistir a un concierto masivo de 6.000 personas cuyas entradas estaban todas vendidas. El caos y el dolor fueron inexpresables. Morían bajo los tiros las personas y los terroristas colocaron además bombas incendiarias que generaron un inmenso fuego que se veía a kilómetros de distancia.
El techo se vino abajo y las víctimas quedaron atrapadas, niños incluidos. Por ahora se contabilizan 93 y los heridos se acercan al centenar. Nos marchamos anoche de la redacción con el corazón encogido y aterrorizados con la posibilidad de que hubiese sido una acción de comandos ucranianos y que hoy, justo después de la entronización de Putin como presidente hasta 2030, nos enfrentásemos a una reacción salvaje y al peligro de una Guerra Mundial. Por eso fue casi un alivio, fíjate que monstruosa paradoja, escuchar a los portavoces de la organización terrorista Estado Islámico reivindicar este horror por la red social Telegram, como venganza por el apoyo ruso contra ellos en Siria o en Somalia.
Era viernes, así que hace sentido. El día santo de los musulmanes es la jornada que prefieren los yihadistas para perpetrar sus crímenes. ¿Cómo puede matarse en nombre de Dios? Pobres musulmanes, que padecen este desdoro por parte de estas bestias. Hasta qué punto pueden llegar el fanatismo y la cerrazón, que hacen de lo más sagrado un instrumento para matar. Estados Unidos y Gran Bretaña habrían avisado hace dos semanas de la posibilidad de este tipo de atentados en Moscú y otras ciudades y pedido a sus connacionales que no frecuentasen aglomeraciones.
Es noticia de última hora la detención de once de los responsables, cuatro de ellos asaltantes del centro comercial.
Y mientras: Puigdemont, la pareja de Ayuso, negociaciones rotas PP-Ciudadanos...
La noticia ha congelado cualquiera de las nuestras nacionales, que se han minimizado ante la magnitud del horror. La vuelta de Puigdemont como caudillo triunfante, exonerado del golpe de Estado en Cataluña. O la acusación judicial formal contra el novio de la presidenta de la Comunidad de Madrid, por fraude fiscal y falsedad de documento. O el fiasco de las negociaciones entre el Partido Popular para armar una alternativa constitucionalista a los independentistas y a sus secuaces del partido socialista. Esta última información se produjo en la tarde de ayer, cuando Alejandro Vázquez, secretario general de Ciudadanos, dimitió, agotado y decepcionado.
Una pena, la verdad. Es la defunción final de los naranjas y la demostración de que los más listos aquí son los de Puigdemont, Junqueras y Sánchez. ¿Qué puede votar el próximo 12 de mayo un ciudadano que desee el orden legal y la solidaridad entre españoles? Salvador Illa, del partido socialista, se presenta como alternativa y no lo es. Fue, solo, uno de los ministros de Pedro Sánchez y es claro para quién trabaja. Veremos qué hace el PP.