Maribona, crítico gastronómico, no puede con lo que hacen algunos restaurantes: “Me parece una guarrería"

El crítico gastronómico de ABC detalla en COPE las últimas modas que observa en los restaurantes a las que no les ve mucho sentido

Pilar Abad

Publicado el - Actualizado

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Si hablamos de crítica gastronómica, hablamos de un nombre y de un hombre: Carlos Maribona. El crítico de ABC y el “primer periodista profesional que tuvo un blog de gastronomía” como él mismo recuerda en ‘Herrera en COPE’.

Y es que hace ya, la friolera de 18 años, desde que ‘Salsa de chiles’ viera la luz en el mundo digital, en algo a lo que a su autor Maribona le “sonaba raro por ser un periodista de la vieja escuela”, y que por aquel entonces empezaba a despegar.

A los 18 años Carlos ya estaba trabajando en un periódico y gracias a que “mi padre me llevaba a comer a los buenos restaurantes de la época, ya tenía buena afición por la gastronomía”, lo que le ayudó a escribir sobre este tema, al principio alternándolo con el resto de la información.

Así se mantiene en forma un crítico gastronómico

Entre tantas comidas y cenas, y no sabemos si hay meriendas o el tal ‘brunch’ tan instalado ya en nuestras vidas, muchos nos preguntamos cómo se mantiene en forma o cómo cuida su línea un crítico gastronómico.

En este caso, Maribona tiene un plan: “los cinco días de la semana como fuera si estoy en Madrid. Si estoy fuera, como y ceno fuera. Pero eso sí, cuando estoy en Madrid no salgo a cenar, las cenas las tengo prácticamente prohibidas y ceno ligero en casa”.

Pero hay más, “suelo andar una hora y media al día. A los restaurantes voy y vuelvo andando”.

Los cuatro factores que debe tener en cuenta un restaurante

A la hora de ir a comer a un restaurante, la gente de a pie solemos fijarnos en algunos detalles pero otros, se nos escapan. No cabe duda que lo principal es la comida, sin entrar mucho en juicios de valores, al final decidimos si ha sido buena o mala. Al igual que el servicio, al que también solemos prestar atención.

La comida es importante, pero el servicio es fundamental

Precisamente estos dos aspectos son dos de los factores que destaca Maribona como imprescindibles para un restaurante, sobre todo el servicio porque como señala “si vas a comer a un restaurante y te han atendido muy bien, aunque la comida haya sido regular, sales del restaurante con buenas sensaciones”.

Por eso, subraya el crítico gastronómico que “la comida es importante, pero el servicio es fundamental”. Así, a estos dos factores: producto y servicio, hay que añadirle también la acústica y la instalación.

¿Qué ocurre con los manteles en los restaurantes?

Una de las modas que se ha implantado en los últimos tiempos por la que Carlos Maribona ha iniciado una campaña para que los restaurantes lo tengan en cuenta, es el tema de los manteles en las mesas: han desaparecido.

Algo que el crítico gastronómico define como “una guarrería”, añadiendo que “no es sano”. Para Maribona no tiene ningún sentido que no se empleen los manteles en la mesa porque como subraya, a la hora de comer ponemos los cubiertos, el pan… sobre una superficie “que han limpiado con un paño con el que no sabes qué otras cosas han limpiado”.

Una moda que atiende “a una medida de ahorro o a que puede ser más cuqui, más divertido comer sin mantel” dice Maribona recordando que hasta “en las casas de menú del día te ponen un mantel de papel, como mínimo”.

Sin embargo, no se muestra optimista el crítico gastronómico de que su campaña llegue a buen fin: “Me temo que es una batalla que estamos perdiendo”

La “tontería” de las “croquetas sombrero”

Tanto Alberto Herrera como Maribona se declaran fanes de las croquetas, pero los dos alertan de algo que están haciendo con este suculento manjar que no es otra cosa que “poner algo encima de la croqueta, como atún, setas… “ dice Alberto.

Lo que Maribona llama “croqueta sombrero” y le “parece una tontería”, confiesa. Porque como bien dice el crítico gastronómico “la croqueta es rica por sí misma”. “Qué necesidad tienes de ponerle a una croqueta de jamón, una lonchita de jamón por encima. Que no somos tontos”, espeta.