“La Lotería se portó bien y dejó unos tres millones de euros entre algunos de los municipios más afectados por la DANA”

¿Qué tal, buenos días? Saludos de Sergio Barbosa, en nombre de la gente que hace posible HERRERA EN COPE en este lunes 23 de diciembre de 2024.

Y la S salud que tiene usted hoy.  Y lo bueno que es tener trabajo o, si cobra uno la pensión, saber que el gobierno va a subir hoy las pensiones en el Consejo de Ministros.

Hoy será uno de esos días en los que habrá que seguir aplicando aquello de “el que no se consuela es porque no quiere”.

Porque claro, la posibilidad de que te tocara el Gordo es de una entre cien mil. Tú compras un número y tu número tiene que ser el que salga en ese momento preciso  en lugar de las otra 99.999 bolas.

Que pasar pasa... y siempre los hay que les toca... pero, hombre... es complicado. Como también lo es que te toquen los otros grandes premios.

Es verdad que nos queda la ilusión previa, y el gusto de alguna pedrea o algún pequeño premio que nunca viene mal. 

Pero esta mañana hay que felicitar a la gran premiada de la Lotería de Navidad, esa dama de rancio abolengo, llamada doña agencia tributaria.  

Porque sólo entre los 352 millones que se ha ahorrado en premios no repartidos del Gordo y el pico que se lleva por cada premio que sí ha entregado (72 mil euros, por ejemplo, por cada décimo del primer premio que se queda entre las uñas, pues Hacienda es como la banca: que nunca pierde.

Y luego ya, pues sí, claro este lunes seguirá siendo un día pletórico para todos aquellos a los que ayer les tocó un buen pellizco.

Si sólo con que rasques 100 eurillos de una pedrea.... ya te da como un gustirrinín de baja intensidad.

Imagínese la alegría que tienes que llevar (además de la estupenda anécdota que siempre tendrás para contar a los nietos)  si te pasa como a los que ayer tenían algún décimo del 7248O y, de repente, les tocó el Gordo de la Navidad. 

El primer premio se vendió en Logroño y a lomos de la magia que siempre tiene la Lotería de Navidad.

También viajó, a través de una serie de participaciones, a un barrio popular de Madrid: a San Blas,  donde fue muy bonito comprobar cómo se repartieron hasta 400 millones entre un modesto club de baloncesto, llamado “Distrito Olímpico”,  de cuando en ese barrio soñaron con ser el epicentro de unas Olimpiadas, pero las Olimpiadas pasaron de largo como Mister Marshall. 

Bueno, pues años más tarde la suerte sí les ha sonreído como sonrió también en Valladolid   epicentro del segundo premio: el 40014, que luego, como tantas veces, se repartió un poco por toda España.

Y también fue curioso cómo el tercer premio, el 11840 cayó en un gimnasio de Bilbao  Estaba la gente allí machacándose un domingo por la mañana (con el mérito que tiene levantarse un domingo por la mañana para darte la paliza en la cinta o con las mancuernas, hasta que uno dijo “oye,que nos ha tocado el tercer premio”,  y a partir de ahí la gente se olvidó del entrenamiento.

Claro, son esas escenas que cada año nos fascinan, porque, aunque no te toque, siempre te queda la cosa de… “¿y si un día me toca a mí?”. Porque si a esta gente le ha tocado, quién te dice que no te pase a ti algún día.

los reyes, en valencia

Luego estaba también ese deseo colectivo de que la suerte repartiera dinero en Valencia, donde, efectivamente, la Lotería se portó bien y dejó unos tres millones de euros entre algunos de los municipios más afectados por la DANA.

Desde luego, ayer fue un día de sorpresas en Valencia porque, sin ir más lejos, en Catarroja la gente estaba en el mercado municipal, comentado que en el municipio habían tocado 500.000 euros en premios cuando, de repente, alguien se dio cuenta de que uno de los presentes,  oye, como que se parecía mucho al Rey y que además estaba acompañado por una señora que se daba un aire a la Reina y por dos muchachas que se parecían muchísimo a la princesa Leonor y a la infanta Sofía.

Vamos, tanto se parecían que, efectivamente, era la familia Real al completo que, sin que estuviera previsto en su agenda oficial  decidió hacer una nueva visita a la zona afectada por la DANA

Bueno, si agradable fue la segunda visita, tras los incidentes de Paiporta este tercer viaje a Valencia ha dejado escenas de mucho cariño, entre la familia Real y los valencianos,  en un año muy duro, y en el que la gente ha sabido entender quién ha tenido una actitud constructiva, sin olvidarse de ellos,  frente a quiénes, tal vez, estuvieron menos acertados en los primeros momentos de la tragedia, bien superados por los acontecimientos o abusando del tacticismo político.

A Pedro Sánchez, por cierto, hoy tampoco se le espera en Valencia. 

No se le espera porque los planes del presidente del Gobierno pasan por celebrar el último consejo de ministros del año y hacer balance de este 2024. 

El presidente del gobierno se adelanta, precisamente, al discurso de Navidad del Rey y será este lunes cuando comparezca en Moncloa para decirnos cómo ha visto él este año que ahora termina.

borrado del móvil del fiscal general

Claro, pedirle a Sánchez que te explique cómo ha visto él las cosas,  puede ser un poco sicodélico, teniendo en cuenta que la semana pasada nos pidió a todos que pidiéramos perdón al Fiscal General del Estado,  después de que el Fiscal General del Estado borrara de su móvil las pruebas que le podían incriminar en el delito de revelación de secretos que le tiene imputado.

Un “arranque” del presidente que ha provocado cierto estupor incluso entre una parte de su entorno.

Lo mismo hoy Sánchez sale también enfadado a echarnos la bronca porque aquí no parece que la gente haya salido a los balcones a aplaudir a García Ortiz, a las ocho de la tarde, ni que se hayan organizado viajes en autobús a la sede de la Fiscalía para pedirle perdón.

Lo mismo Sánchez vuelve a exigir que se pida perdón a un personaje, cuya actitud escandalosa, en todo caso ha seguido suscitando numerosas reflexiones en las últimas horas.

Hay muchos analistas que se preguntan cómo puede ser que García Ortiz haya hecho algo tan burdo como borrar los mensajes de su móvil justo los días clave de la filtración de los datos fiscales de la pareja de Ayuso.

Porque es una maniobra que, (por más que Sánchez quiera convencernos de lo contrario)… lo que hace es, seguramente, complicar su defensa sin que algunos descarten ni siquiera un posible delito de obstrucción a la justicia. 

Algo que, además, puede acabar siendo inútil porque la UCO dispone de un software que podría recuperar los mensajes borrados. 

Así la cosas, que el Fiscal General borrara los mensajes de su móvil se puede enmarcar o en una actitud desesperada o, según algunos, en todo lo contrario: en un acto perfectamente premeditado, pensando en que “perjudicarse a sí mismo” al hacer algo tan burdo como borrar los mensajes que le podían incriminar,  era mejor opción que dejar que la UCO accediera a todos los mensajes que había en su móvil entre el 8 y el 14 de marzo..

Incluidos los que ya se conocen porque están en otros terminales, como los de la Fiscal Provincial de Madrid, pero tal vez también con terceras personas vinculadas, quien sabe, a altas instancias del gobierno.

De momento, son sólo especulaciones  porque los mensajes, “borrados están” y eso ha animado a Sánchez a decir, con todo el cuajo, que eso demuestra que no hay pruebas y que no hay caso.

Claro, lo de cerrar el caso como nos pide el presidente es correr demasiado porque aquí no hay que olvidar todo lo que ha aparecido en el móvil del socialista Juan Lobato.

De hecho, los siguientes en tener que declarar ante un juez puede que sean “el actual” y, sobre todo, el anterior Secretario de Estado de Comunicación.

Porque no nos olvidemos de que la UCO ha visto una coordinación entre Moncloa y la fiscalía en la filtración de unos datos confidenciales para perjudicar a un rival político.

fin de año sin presupuestos

El caso es que con ese cuajo y con toda esa campaña contra los jueces que se ha lanzado desde Moncloa, hoy decimos, toca hacer balance de un año en el que lo primero que hay que decir es que estamos ante un presidente que termina el año sin tener presupuestos. 

Esto, en el mundo de ayer, sería el temazo absoluto en los circuitos políticos y mediáticos, pero ahora, con tanto escándalo judicial y estrategia populista, lo de terminar el año sin un nuevo presupuesto para el país  casi parece “pecata minuta"

De hecho, hace poco, el gobernador del Banco de España (y hasta hace dos días ministro de Sánchez) José Luis Escrivá vino a decir que, bien pensado, tampoco es tan dramático tener que prorrogar los presupuestos.

Lo cual da una idea de lo mucho que han cambiado las percepciones, desde que Sánchez estaba en la oposición y exigía al entonces presidente que convocara elecciones si no era capaz de aprobar unos presupuestos:

Pues ya ven cómo ha cambiado el cuento. Ahora, a Sánchez la idea de convocar elecciones simplemente porque se haya encajado a 23 de diciembre sin presupuestos, le da la risa.

En todo caso, en Moncloa siguen siendo optimistas ante un posible acuerdo de presupuestos a comienzos de 2025  cosa que ciertamente no se puede descartar,   a pesar de la última inquietud que le ha surgido al gobierno.

Y esa inquietud tiene que ver con los últimos entendimientos puntuales del PP con JUNTS y PNV,  que a su vez han perdido el miedo a votar puntualmente con VOX o coincidir con VOX en alguna votación.

También es verdad que en Moncloa quieren seguir pensando que esos acuerdos son muy puntuales y que, a la hora de la verdad, ningún partido nacionalista va a ser capaz de dejar caer a Sánchez.

Así las cosas, lo más urgente para el presidente del gobierno va a ser dar a JUNTS todo lo que JUNTS pide en materia de inversiones para Cataluña para que ellos aprueben los presupuestos.

Y todos esto sin descartar que Sánchez se plantee incluso acabar la legislatura prorrogando las cuentas.

Ya les digo. Esto en “el mundo de ayer” sería impensable, pero Sánchez hace tiempo que se consagró como el presidente de las primeras veces. 

Como eso de tener a una esposa imputada por varias causas entre ellas, la de haber contratado a una amiga como asesora en Moncloa que, a la hora de la verdad, se dedicaba a hacerle de secretaria para sus negocios particulares.

El otro día cuando Cristina Álvarez compareció ante el juez, como testigo, obligada a decir la verdad  reconoció que no sabe muy bien los detalles de las atribuciones de su contrato en Moncloa. 

Lo que sí sabía era hacerle de secretaria a Begoña Gómez, pero para salvar ese hecho incómodo,  le dijo al juez que le hizo las gestiones de pedir fondos para su cátedra, como un favor a una amiga.

Para algunos será una versión convincente,  para otros sonará escandaloso que en este gobierno haya tan pocos escrúpulos a la hora de diferenciar entre lo público y lo privado. De igual manera que no ha sabido diferenciar entre lo partidista y lo institucional.

En todo caso, hoy tenemos más asuntos  porque en ese Consejo de Ministros de hoy  se van a aprobar, o van a prolongar medidas, que nos pueden interesar en el día a día.