El desconocido pariente del salmorejo que te puede salvar del calor: muy difícil de encontrar
En 'Herrera en COPE' hemos conocido la receta del antecedente histórico del salmorejo, una sopa fría muy poco conocida en muchas partes de España
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Suben las temperaturas y apetecen comer cosas fresquitas. Por eso, en 'Herrera en COPE' hemos querido traerte de la mano de Goyo González algunas de las recetas más refrescantes, y poco conocidas, para afrontar un calor que, poco a poco, se está haciendo notar en España. Por ejemplo, las sopas frías. El salmorejo es una de las estrellas de la cocina de nuestro país, en concreto el hecho en Córdoba.
Según la RAE, en una de sus acepciones, se trata de una salsa compuesta de agua, vinagre, aceite, sal y pimienta. Una definición que entronca claramente con el origen del salmorejo. Pues esta palabra, en sus inicios, estaba más relacionada con un aliño que con una sopa fría, ya que al principio se trataba de una salsa compuesta a base de agua, vinagre, sal y aceite, con la que se aderezaban distintos alimentos, como el conejo.
El origen del salmorejo y su pariente más cercano
Las primeras referencias a la palabra salmorejo, tal y como la conocemos hoy en día, vienen del siglo XVII. En ese momento era una sopa de transición, entre el Viejo y el Nuevo Mundo. Porque llegaban los tomates de América, que eran incorporados a estos platos progresivamente a este tipo de sopas primitivas.
Es en estas sopas primitivas, con larguísima historia en nuestra península, donde encontramos el origen del salmorejo, a las que luego se les añadiría el tomate. Pero la realidad es que el concepto de sopa fría ya existía en una España donde, también en los siglos pretéritos, sus habitantes sentían el peso del sol que ilumina nuestras tierras.
Es aquí donde cabe destacar a la mazamorra, una peculiar sopa fría, emparentada directamente con el salmorejo y que, como ha reconocido Carlos Herrera, se trata de uno de sus platos favoritos, a pesar de que no es fácil de encontrar.
"En Córdoba sí, pero fuera de Córdoba...", es lo que ha dicho Carlos Herrera, quien se ha mostrado entusiasmado con la mazamorra como plato de sopa fría, ideal para combatir los efectos que el calor pueda tener en nuestra alimentación. Pero, ¿qué lleva la mazamorra y por qué está tan buena?
Mazamorra, una sopa fría difícil de encontrar
Si va a Córdoba, pare en cualquier restaurante y pida una. Si no, tenga en cuenta las siguientes indicaciones para poder elaborar ua buena y fresquita mazamorra en su casa.
La receta es muy sencilla y consiste en batir en una batidora prácticamente todos los ingredientes juntos, hasta que queden bien desechos y en forma de pasta. Poco a poco le puede ir echando el aceite. Volvemos a batir y finalmente se va añadiendo agua hasta alcanzar la consistencia deseada. Al final se sirve con las aceitunas o el huevo como aderezo al gusto.
Las sopas frías y el cambio que supuso la Conquista de América
El origen de las sopas frías no incluía el tomate y es solo tras el descubrimiento de América, del Nuevo Mundo y de sus alimentos propios que hoy nos acompañan en el día a día, que se incorporaron estos tomates.
Es un plato pobre, de gente humilde, de gente de campo y se encuentran sopas parecidas en distintas zonas de Andalucía. El salmorejo tiene un entronque con la sopa castellana, ya que sería una versión caliente, no fría. Esta tiene pan, tiene agua, tiene sal, tiene ajo y aceite. La gran diferencia es que, en este caso, se trata de una sopa caliente, algo que quizá no sea la mejor idea con el verano y el calor tan cerca.