Así se produjo un giro en la vida de una vecina de Talavera tras quedarse en el paro: "Tuve que reinventarme"
Marimar Bermejo es un caso muy particular sobre la búsqueda activa de empleo y ha contado su historia a Expósito en 'La Linterna'
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Marimar Bermejo es un caso muy particular. Lleva en paro desde 2018 pero no ha dejado de buscar empleo ni de formarse. Ha contado a Expósito que "ya en 2008, cuando se hablaba de crisis, nosotros lo estábamos pasando mal ya en Talavera. Uno iba saliendo adelante como podía y gestionando sus recursos".
Ella trabajaba en un negocio familiar y cerraron el establecimiento a finales de 2013 principios de 2014. Era una tienda de muebles que su padre levantó con muchísimo esfuerzo y trabajo.
Visto con perspectiva, pregunta Expósito...¿por qué quebró? "Yo la verdad es que no sabría analizarte todas las variables. Una de ellas fue la mala situación que estaba pasando Talavera. Esto es como una pelota de nieve que va rodando y se va haciendo más gorda. Y a nosotros nos arrastró", cuenta Marimar.
Esta vecina de Talavera tenía 43 años cuando le pilló la crisis. Tuvo que reconstruir su vida y formarse de nuevo. Por eso, decide hacerse coach. "Fue algo que me encontré realmente. Ni siquiera lo conocía. No sabía lo que era el coaching. Y la verdad es que yo lo que decidí cuando cerramos el negocio es que tenía que trabajar. Tengo 6 hijos. Algunos estaban en Madrid estudiando y decidí formarme".
Así, consumió los dos años de paro en no estarse quieta. "Hice también un curso de gestión y creación de microempresas por si acaso emprendía. Y a partir de este camino, surgió el coaching. Lo conoció un hermano mío que también se había quedado en paro y a mí me fascinó", explica.
"Fue una etapa de la vida en la que he aprendido mucho"
Pasan los años, Marimar se hace coach y monta un negocio en Talavera. Con valor. "Lo iniciamos con muchísima ilusión y esfuerzo y nos pusimos a abrir camino. Trabajamos para la máquina de comercio, la diputación de Toledo, el ayuntamiento de Talavera, Cruz Roja, Cáritas... haciendo talleres. Trabajamos mucho la gestión emocional, los recursos, la iniciativa, el autoconocimiento, la imagen o la autoestima".
Y esta aventura dura desde 2015 hasta 2018. Marimar era autónoma, tenía que desplazarse y no le resultaba rentable. Por eso, "junto con otras circunstancias también personales no me compensa. Fue una etapa de vida en la que he aprendido mucho".
Vuelve a reinventarse. "Una de las acciones que tenían salida era Técnicos en Cuidados de Auxiliares de Enfermería. No me pareció mal. Siempre todo era un poco superación. Tenía que volver a sentarme a estudiar. Cuando hice las prácticas en el hospital de Talavera yo estaba con niñas como mi hija y me hacía mucha gracia", cuenta a Expósito.
Marimar, incansable, sigue formándose. Se trata de un ejercicio de voluntad muy complicado. "Lo más difícil ha sido compatibilizarlo. Atender la casa, por ejemplo".
Por su experiencia, y todos estos años, asegura Marimar que hay cierta dificultad de búsqueda de empleo por distinción de sexo.
Expósito le pedía algo para finalizar su entrevista. Que se dirigiese a personas que atravesaron una situación similar a la suya. "No hay que cargarse con el peso de la situación, del entorno, el Gobierno...", concluía.