Resuelven un enigma que ni Albert Einstein pudo explicar: "No tenemos que cambiar"
Analizamos con Jorge Alcalde, en La Linterna, en la sección de ciencia, un enigma que ni Albert Einstein pudo explicar, la sonda Osiris Rex y la estrella TCRB
Madrid - Publicado el - Actualizado
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Por primera vez, en un laboratorio de Suiza se ha demostrado que la antimateria también cae hacia abajo atraída por la fuerza de la gravedad, es decir, igual que la materia. Se resuelve, por tanto, un enigma que ni Albert Einstein, con su teoría de la relatividad, pudo explicar.
El divulgador científico de COPE, Jorge Alcalde, explicaba acerca de la antimateria que "las teorías que dan explicación a cómo funciona el cosmos dicen que con el Big Bang, cuando el universo nació, tuvo que nacer la misma cantidad de materia que de antimateria, la materia es de lo que estamos compuestos todos, es decir, átomos que están formados por algunas partículas y muchos electrones. Debería existir la misma cantidad de lo mismo, pero especular, como si fuera un espejo, de un electrón, tiene que existir su pareja, un positrón, que sería el antielectrón, pero el problema es que no lo vemos, solo vemos materia y una de las teorías es que la fuerza de gravedad expulsaba a la antimateria, pero eso no es así, hoy se ha demostrado que la fuerza de la gravedad también afecta a la antimateria como la materia cayendo hacia abajo".
Esto implica, según comentaba Jorge, que "no tenemos que cambiar los libros de física y que Einstein tenía razón, el mundo funciona como dedujo y tenemos que seguir buscando la antimateria, aunque permite acercarnos y dónde está esa relación extraña entre su partícula y su antipartícula que en algún lugar del cosmos está como si fuera un espejo"
Sonda Osiris Rex
La NASA continúa sorprendiéndonos, la sonda Osiris-Rex, que pasó siete años en el espacio, ha vuelto a la Tierra con un valioso botín. Esta sonda, que aterrizó el domingo en el desierto de Utah, Estados Unidos, ha recogido piezas del asteroide Bennu. Este asteroide, explicaba Jorge, que "viaja a millones de kilómetros de la Tierra y es uno de los pocos de los que hemos podido extraer muestras en el año 2020"
Ahora, la NASA realizará un detallado análisis de este material y el 11 de octubre habrá una rueda de prensa para darnos todos los detalles. Las muestras del asteroide Bennu representan un tesoro para la comunidad científica. Permitirán a los expertos comprender mejor la formación de nuestro Sistema Solar y cómo la Tierra se convirtió en un lugar habitable. Los científicos creen que este asteroide contiene carbono y moléculas de agua que podrían revelarnos información crucial sobre el origen de la vida en el espacio.
En cuanto al proceso de análisis del material recogido del asteroide Bennu, Jorge explicaba, que "van a empezar a analizarse en varios laboratorios en Estados Unidos y Japón, de momento sabemos que es un polvo negro, si puede proceder del aire o de alguna contaminación y a partir de ahora se va a analizar gramo por gramo para ver si descubrimos algún tipo de pista que nos conduzca a saber si la vida en la Tierra vino a lomos de una de estas piedras hace millones de años".
Una estrella desapercibida
Vamos a hablar sobre un hecho que ocurrió hace casi 800 años, pero que está cobrando relevancia en la actualidad. En 1212 un monje alemán observando el cielo presenció algo sorprendente: una estrella que solía pasar desapercibida, brillaba con intensidad. Y lo siguió haciendo durante varios días. Abbott Burchard, - que así se llamaba el monje - dejó constancia de ello por escrito y lo describió como una "señal maravillosa" en la constelación de la Corona Boreal.
Este manuscrito medieval es el primer registro de un fenómeno espacial raro. Este monje bautizó el fenómeno como 'nova recurrente', esto es "un fenómeno que ocurre casi 80 años aproximadamente", comentaba Jorge. Ahora el astrónomo Bradley E. Schaefer ha descubierto que la 'señal maravillosa' del monje podría ser TCRB, un tipo de estrella que se encuentra en la constelación de la Corona Boreal. La información que podemos obtener del estallido de TCRB es que "va cargada de datos sobre su estructura, origen y futuro y del resto de estructuras de estrellas que componen las galaxias".