"Buenas tardes a la gente, gente:
La historia de Uruj y Anissa, de 21 y 24 años, nos ha sobrecogido. Uruj y Anissa, de origen pakistaní, vivían en Tarrasa. Las dos fueron forzadas a casarse con sus primos. Hace unos días volvieron a Pakistán y expresaron su deseo de separarse de sus maridos. Varios hombres de la familia las han asesinado por lo que consideran una deshonra. Son las cosas bárbaras que se hacen en un país bárbaro. Hace tres años tuve ocasión de viajar a Pakistan y entrevistar a una niña de 14 años que había sido violada, forzada a casarse y a convertirse al islam. Cosas bárbaras de un país bárbaro. España no es un país bárbaro, pero aquí también mueren mujeres porque no hace lo que quieren los hombres. Desde hace 20 años han sido asesinadas 1.144 mujeres por no hacer lo que quieren los hombres. España y Pakistán tienen dos culturas muy diferentes, pero en los dos países hay casos de un amor de familia o de un amor de hombre, que es lo más lejano que hay al amor, un amor que no es amor que no soporta la libertad de las mujeres, que no las quiere libres. Si no te quiere libre, no te quiere.
Sánchez en Davos
Tenemos al presidente Sánchez en Davos. Davos es un monte suizo donde suele hacer mucho frío y donde se reunen los líderes mundiales, los grandes empresarios, los grandes directivos. Sánchez está en Davos para vender España, y eso está muy bien. Tan bien ha querido vender España Sánchez que ha dicho que tenemos una economía estupenda.
Que por optimismo no quede. El problema es que los grandes empresarios y los grandes directivos de Davos son gente informada y saben lo que dijo el director general del Banco de España, Ángel Gavilán: "De las grandes economías del euro, somos la que peor lo ha hecho".
Sánchez ha ido a Davos a buscar inversores para potenciar el sector del microchip en España. Y eso está muy bien, más que el futuro es el presente: la industria digital. En nuestro país hay pocas empresas relacionadas con los semiconductores y son pequeñas. Alemana, Francia y Austria nos han sacado la delantera. El Gobierno, para impulsar los microchips ha aprobado este martes uno de los programas de fondos europeos de 12.250 millones para gastarlos en el sector. Seguramente ese dinero llegará tarde o no llegará a los empresarios. De momento solo uno de cada cuatro euros de los fondos han llegado a las empresas. De momento el Gobierno no ha sido capaz de aprobar una ley que regule los fondos porque no tiene apoyo parlamentario. De momento el Gobierno tiene pendiente promover 30 leyes para cumplir con los compromisos adquiridos con Bruselas. Eso no está bien".
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