Andrea, la niña que ha recuperado la sonrisa tras extirparle un tumor en la espalda
A sus 14 años no podía hacer las cosas que hacen las chicas de su edad
Madrid - Publicado el - Actualizado
2 min lectura
Andrea Nicolle es una adolescente panameña que ha sido operada en el Hospital de La Paz de Madrid. Tiene 14 años y no podía hacer las cosas que hacen las chicas de su edad. Su vida era durísima.
Ella vivía en Panamá con sus hermanos, madre y abuela en una pequeña habitación. Andrea salía muy poco de casa porque tenía un enorme tumor en la espalda que afectaba gravemente a muchos de sus órganos. Era una masa de más de 30 centímetros que salía por su espalda.
Andrea lleva meses sonriendo. El tiempo que ha transcurrido desde la última operación a la que se sometió para extirparla el tumor, en el Hospital Universitario de La Paz de Madrid.
Tres intervenciones ha sufrido Andrea: en la primera, el 11 de abril, le quitaron parte de la masa. El 7 de mayo le retiran la parte ventral del tumor y el 25 de mayo se somete a una tercera operación para atacar una recaída que afectaba a la zona paravertebral. La niña, nada más recibir el alta hospitalaria el 5 de julio, regresó con su familia a Panamá.
ESCUCHA LA ENTREVISTA COMPLETA EN 'LA TARDE'
Andrea había sido desahuciada por los servicios médicos de su país y sólo esperaba la muerte; hasta que el periodista Luis Casis, reconocido en Panamá por su apoyo a los desfavorecidos, comentó su caso a los amigos de la Fundación Olloqui por la Infancia. Esta organización no dudó en movilizar a unos medios de comunicación panameños que recaudaron más de 60 mil dólares en 48 horas. Y a varias unidades médicas, dirigidas por el cirujano plástico Juan Carlos López Gutierrez, del Hospital La Paz.
La joven contó durante su recuperación con uno de los pisos de acogida que ofrece a niños con enfermedades raras la Fundación Olliqui por la infancia.
Andrea ha reconocido en 'La Tarde' que ya puede hacer vida normal. Ya puede ir a la escuela. “Estoy bien, gracias a Dios. Al principio fue muy duro y muy difícil pero el resultado ha sido muy satisfactorio”.
“Estuve casi 7 meses sin ir al cole. Cuando regresé me recibieron con una bienvenida sorpresa. Ahora ya puedo andar y hacer más ejercicio físico que antes era imposible. Puedo hacer muchas cosas más”, ha añadido la adolescente.