La inteligencia artificial, a un paso de leernos la mente: así puede traducir tus pensamientos

Leer la mente quizás sea una de las grandes aspiraciones del ser humano a lo largo de la historia. Afortunadamente, es algo impensable e imposible… hasta hace poco. Un grupo de científicos estadounidenses ha conseguido leer la mente con una resonancia magnética del cerebro. El estudio, publicado en la revista científica Nature Neuroscience, demuestra que la tecnología que han desarrollado en capaz de convertir lo que estaban pensando y escuchando en el podcast que se les puso a los participantes de la investigación en frases completas y coherentes que se asemejan bastante a lo que habían oído.

El divulgador científico de La Tarde, Jorge Alcalde, explica que a este grupo de personas se les sometió a unas resonancias magnéticas funcionales, que son un tipo de resonancias que se utilizan mucho en medicina y se caracterizan por que se puede ver cómo funciona el cerebro a tiempo real. “Según va teniendo diferentes actividades, el cerebro genera circulación sanguínea en unas áreas más que en otras, y eso permite saber qué áreas se están activando en concreto. Gracias a eso, ya la ciencia sabe desde hace tiempo qué áreas se activan cuando pensamos en determinadas cosas, por ejemplo cuando decimos ciertas palabras o cuando tenemos ciertos recuerdos.”

“Hasta ahora lo único que se podía hacer es identificar esas áreas y, como mucho, que un ordenador emitiese alguna palabra”, indica Alcalde. Lo que se ha conseguido ahora, gracias a la inteligencia artificial, es dar un paso más allá: a partir de lo que está pensando el paciente, el programa es capaz de “ver” esas imágenes que está procesando el cerebro y plasmarlas en frases complejas y con sentido. “De alguna manera se traduce textualmente parte del pensamiento que esa persona está teniendo”.

De todos modos, este programa todavía comete bastantes errores, como señala Jorge Alcalde, ya que en la mayoría de los casos no ofrece una reproducción literal de lo que el participante estaba pensando. Sin embargo, su significado sí que se correspondía mucho con lo que pasaba por su mente en ese momento, así que es un gran paso.

Especialmente se verán beneficiadas por este sistema aquellas personas que por cualquier enfermedad, como la ELA o alguna parálisis cerebral, pueden tener dificultades en el habla y no son capaces de comunicarse con normalidad. “Podrían beneficiarse mucho de un sistema tecnológico que permitiese reproducir sus pensamientos y, por supuesto, este es el objetivo principal de esta investigación”, asegura el divulgador en La Tarde.

La intención del estudio es buena, pero podría torcerse en malas manos

A pesar de todo lo bueno que puede aportar la inteligencia artificial, en este caso en el ámbito médico, tampoco está exenta de algunos riesgos, sobre todo en cuanto a la intimidad. Precisamente el equipo de investigadores al frente del estudio ya ha pedido que se establezcan una serie de normas para proteger la privacidad ante esta tecnología.

Y es que podríamos llegar a un punto tan inquietante en que ni siquiera nuestra mente fuera algo privado.

En este sentido, Jorge Alcalde se ha encargado de tranquilizarnos, ya que ha detallado que “esta tecnología, de momento, no sirve para meterse en la mente de nadie”.

Para empezar, los participantes en el estudio han tenido que realizar horas de entrenamiento, puesto que se debe cooperar de alguna forma con la máquina y pensar de una manera determinada para que el programa sea capaz de captarlo y traducirlo en frases, no es algo espontáneo. Además, por el momento es necesario que el paciente se meta dentro de la máquina de resonancia magnética, es decir, la persona debe prestarse de manera voluntaria. Con lo cual, por ahora nuestros pensamientos están a buen recaudo.