¿Qué tienen en común la desaparición del hombre de Manzanares con otra de hace 3 años?: Ambos quedaron con él
El mismo intermediario había quedado para realizar una transacción con los dos hombres, uno en 2020 y el más reciente el pasado julio, justo antes de que se les perdiera el rastro
Publicado el - Actualizado
3 min lectura
Desde hace días la Guardia Civil pide colaboración para encontrar a Juan Miguel Isla, un hombre de 58 años, cuyo rastro se perdió en Manzanares (Ciudad Real) el pasado 22 de julio. La tarde anterior a su desaparición había viajado desde la Playa de San Juan, en Alicante, hasta esa localidad manchega para cobrar en metálico 50.000 euros de la venta de una finca familiar. Se había citado con un intermediario en La Solana, un pueblo próximo para recoger el dinero. Pero desde aquella tarde no ha vuelto a saberse nada de él.
La Guardia Civil ha llegado a difundir un vídeo del coche del desaparecido, un Renault Clio gris saliendo de Manzanares por la carretera N430A en dirección a la localidad de Membrilla, por si había algún testigo. Algo que ha dado sus frutos, ya que el vehículo de Juan Miguel ha sido encontrado recientemente después de que un testigo llamara a la Guardia Civil. El coche estaba en un descampado a las afueras de Albacete, aparentemente abandonado ahí desde hace bastante tiempo. El servicio de Criminalística de la Guardia Civil lo está analizando ya en busca de posibles pistas.
Por otro lado, llama la atención que el intermediario con el que había quedado Juan Miguel está siendo investigado por otra desaparición ocurrida hace tres años también en Manzanares. “La Guardia Civil está convencida de que ninguna de las dos desapariciones es voluntaria, pero no se ha encontrado ni rastro, de ahí que decidieran pedir esa colaboración ciudadana”, comenta Cruz Morcillo.
“Había vendido una finca familiar porque él procede de esa zona, aunque ahora vivía en San Juan”, cuenta Pablo muñoz sobre el desaparecido. Isla iba a recoger junto al intermediario los 50.000 euros de ese pago, que era en metálico. Un dinero, por cierto, que tampoco ha aparecido. “El rastro del teléfono de Juan Miguel se pierde a la vez que él, según ha trascendido”, apunta el periodista de sucesos. Tiene mujer y dos hijos, que desde el principio sostuvieron que no era una desaparición voluntaria.
La figura del intermediario, clave en la investigación de los dos casos
Las dos desapariciones tienen un par de puntos en común: por un lado, el lugar, Manzanares, y por otro, el citado intermediario que ya está siendo investigado por la primera desaparición, ocurrida el 19 de junio de 2020. “Se trata de Jesús María González Borrajo, de 55 años, un empresario de máquinas tragaperras de Vitoria, afincado en Manzanares”, relata Cruz Morcillo. “Cuando desapareció acababa de vender dos Mercedes de alta gama a un conocido suyo por 14.000 euros cada uno, y en esa transacción hizo de intermediario el mismo hombre”.
Aunque de momento solo es una sospecha, este hombre, conocido entre los vecinos de la zona como una especie de "conseguidor" que intercede en "operaciones de compraventa de coches, casas y armas", tal y como explica Pablo Muñoz, es el nexo entre ambos casos. “La familia de Jesús María sostiene que él puede ser el autor de las dos y que se los ha quitado de en medio”, indica el periodista de ABC.
Tras su desaparición, el hermano de Jesús María descubrió que el empresario había recibido, poco antes de que se le perdiera la pista, varios pagarés por valor de 28.000 euros que debía cobrar en fechas próximas al día en que dejaron de saber de él. "Desapareció antes de poder cobrarlos, sin embargo él ya había entregado al comprador uno de los coches", según el abogado de la familia. “El hermano de Jesús contó que este tenía comprado un billete de avión con destino a Paraguay, donde también tenía negocios, y debía viajar justo cuando se lo tragó la tierra”, comenta Cruz Morcillo.
Los casos están bajo secreto, pero lo poco que se sabe no apunta a que sean desapariciones voluntarias en ningún caso. “De hecho, la Guardia Civil ya ha realizado batidas en Manzanares, la semana pasada, en busca de Juan Miguel, centradas en una zona de campo donde se perdió la señal de su móvil”, indica Cruz Morcillo. En el operativo participan agentes de la UCO, la USECIC, el Seprona y la unidad canina del Instituto Armado. Buscan su cuerpo o cualquier rastro para saber qué paso.