La comunidad autónoma que prohíbe que circulen en sus zonas de bajas emisiones: el 35% de los coches afectados
Los turismos y furgonetas de gasolina matriculados entre 2001 y 2006 y los diésel entre 2006 y 2014 están en el punto de mira de varias ciudades por la etiqueta que llevan
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Cataluña se convierte en la primera comunidad autónoma en España en dar un paso decisivo para reducir la contaminación en sus zonas de bajas emisiones.
A partir de 2026, los vehículos con la etiqueta B, identificados por la Dirección General de Tráfico con un distintivo amarillo, tendrán prohibido acceder a estas áreas.
Esta medida afecta principalmente a los turismos y furgonetas de gasolina matriculados entre 2001 y 2006, así como a los diésel de entre 2006 y 2014. Se estima que alrededor del 35% de los vehículos en circulación en Cataluña estarán en el punto de mira.
Esta restricción se implementará en al menos 24 ciudades de la región, entre ellas Barcelona y Tarragona, y será progresiva.
La comunidad autónoma que prohíbe
En una primera fase, los vehículos con etiqueta B no podrán circular en los días en que se active el protocolo por contaminación. Sin embargo, en 2028, la medida se convertirá en una prohibición total y permanente para estos vehículos en las zonas de bajas emisiones.
La decisión de Cataluña pone de manifiesto el creciente esfuerzo de las autoridades locales para luchar contra la contaminación ambiental y mejorar la calidad del aire.
No obstante, esta prohibición afectará a una parte considerable de la flota de vehículos, lo que ha generado cierto malestar entre los conductores.
Aunque se espera que otras comunidades autónomas sigan el ejemplo de Cataluña, como es el caso de Baleares, algunas ciudades como Bilbao y San Sebastián ya están en proceso de aprobar medidas similares, las cuales podrían entrar en vigor en la primavera de 2024.
el 35% de los coches afectados
La iniciativa busca acelerar la transición hacia un parque automovilístico más sostenible, favoreciendo a los vehículos con etiquetas más bajas, como la A o la Eco, que emiten menos contaminantes.
A pesar de las críticas de algunos sectores, se espera que estas medidas sean un paso importante en la lucha contra la contaminación en las grandes ciudades españolas.